Acusaciones cruzadas marcan la huelga de trabajadores de Broadway

NUEVA YORK.- Los teatros en la avenida Broadway continúan a oscuras. Los tramoyistas en huelga reiteraron ayer su compromiso de no acudir a trabajar hasta que los productores comiencen a actuar "honorablemente" en la mesa de negociaciones.

James J. Claffey hijo, el presidente del sindicato Local One, señaló que la Liga de Productores y Teatros Estadounidenses necesita hacer ajustes "constructivos" en sus contraofertas laborales.

Un total de 27 obras permanecieron cerradas el domingo, un día después de que los tramoyistas iniciaron una huelga y suspendieron el montaje de piezas tan populares como "El fantasma de la ópera" y "Mamma Mia!" (un musical con temas de ABBA), además de la función de gala por el décimo aniversario en escena de "El rey león".

Los grupos de trabajadores en huelga nuevamente marcharon frente a los teatros afectados alrededor de Times Square.

En este contexto, ocho obras que tenían contratos independientes con el sindicato, permanecieron abiertas, llenando sus salas en más de una función diaria, éxito que se replica en las ganancias.

Entre las obras que aún permanecen abiertas están "El joven Frankenstein", "Mary Poppins" y "Xanadu", entre otras.

"Los mejor pagados"

Y mientras la huelga continúa, los propietarios de las salas de Broadway se refieren a los tramoyistas como "los mejor pagados del mundo", y acusándolos por haber abandonado la mesa de negociaciones.

Según los propietarios los salarios anuales de los tramoyistas pueden superar los 200 mil dólares.

"Local One, el sindicato de tramoyistas, cerró las salas de Broadway.  Abandonaron la mesa de negociaciones y abruptamente iniciaron piquetes", dijo Charlotte St Martin, directora ejecutiva de la Liga de Teatros y Productores.

Según St Martin, los tramoyistas no son "las víctimas" ni la "gente  pequeña" que pretenden ser, porque sus salarios y beneficios anuales promedio totalizan 150 mil dólares y muchos "ganan más de 200 mil dólares".

"Son profesionales que deben estar bien pagados y que seguirán siendo los mejor pagados del mundo en esta industria", aseguró.

La representante de los productores y dueños de salas dijo que los trabajadores en huelga "se niegan a negociar casi todos los puntos, protegiendo costosas, dispendiosas e indefendibles reglas que pesan en contratos tan oscuros y antiguos que nadie verdaderamente sabe cómo, cuándo ni por qué se establecieron".

Según los tramoyistas, los dueños de las salas reciben los beneficios de una industria que recauda "más de mil millones de  dólares por año" y "quieren reducir en un 38% nuestros trabajos y salarios".