LONDRES.- La provocativa película que explora la oscura mente del asesino de John Lennon, Mark David Chapman, se ha estrenado en los cines del Reino Unido. La película, aclamada en 2006 en el Festival de Edimburgo, ganó este año el premio especial del jurado en el neoyorquino Festival de Cine de Tribeca, aunque también ha sido blanco de afilados reproches en el país natal del ex Beatle, asesinado el 8 de noviembre de 1980.
Dirigido por el británico Andrew Piddington, el filme, titulado 'The Killing of John Lennon' ('El asesinato de John Lennon'), recrea con dramatismo las escalofriantes maquinaciones de Chapman, un narcisista trastornado, para acabar con la vida del músico.
Con la precisión de un cirujano, Piddington, que tardó tres años en terminar la película por falta de presupuesto, reconstruye los movimientos del asesino en los meses previos al crimen a partir de sus propias declaraciones a la policía y testimonios de testigos.
El peso del docudrama recae sobre los hombros de Jonas Ball, un actor poco conocido que deleita al espectador con una interpretación sublime -sobrecoge la gélida mirada que le pone a Chapman- y una narración de la historia al estilo del personaje Travis Bickle, encarnado por Robert de Niro en 'Taxi Driver' (1976).
La película arranca con un día en la vida de Chapman, un joven guardia de seguridad de 25 años que vive en Honolulu (Hawai). Está casado con una japonesa, Gloria, a la que recrimina continuamente, al tiempo que se avergüenza de su madre y odia a su padre.
Sin autoestima alguna, el perturbado busca refugio en la novela 'El guardián entre el centeno' ('The Catcher in the Rye'), de J.D. Salinger, y acaba identificándose con el personaje de Holden Caulfield, que no soporta la hipocresía.
En una biblioteca, Chapman se fija también en un álbum de fotos de Lennon y se pregunta cómo un hombre tan rico "nos puede decir [en la canción 'Imagine'] que imaginemos que no hay posesiones". "Él -concluye- es un farsante".
Chapman viaja a Nueva York, hace guardia durante días frente al apartamento que Lennon y su esposa, Yoko Ono, poseen en el edificio Dakota y el 8 de noviembre de 1980 se levanta con una premonición: "Hoy es el día".
Chapman acribilló al músico por la espalda con cinco balas disparadas por un revólver Charter Arms 38: "Yo era un don nadie -alardea- hasta que asesiné al tipo más grande de la Tierra".
Mark David Chapman, que cumplió su condena de 20 años en el año 2000, sigue recluido en su celda del Correccional de Attica (Nueva York) y le ha sido denegada la libertad condicional en cuatro ocasiones debido a la "naturaleza inusual" de su crimen.