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Patricia Maldonado reapareció en pantalla con su nueva figura

La opinóloga volvió a "Mucho Gusto" con menos abdomen, papada, párpados y hasta orejas, todo coronado con tintura lila para su cabello. "La lengua no me la operé", aclaró.

07 de Enero de 2008 | 11:10 | El Mercurio Online
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La opinóloga coronó su transformación con tintura en tonos lila para su cabello, y maquillaje a cargo de Gonzalo Cáceres.

Mega

SANTIAGO.- Con menos papada, un abdomen reducido, párpados recogidos, orejas recortadas, diez kilos menos y el pelo lila, reapareció Patricia Maldonado en pantalla, en la edición de esta mañana del matinal "Mucho Gusto".


"Estamos impactados, qué figura, vieja", le decía un adulador José Miguel Viñuela a la opinóloga, quien de inmediato se lanzó a contar el detalle de su operación, que durante el año transmitirá el programa "Cirugía de Cuerpo y Alma".


Con la canción "Pretty Woman" de fondo (¡!), Maldonado explicó que se sacó la papada ("porque con la gordura perdí el cuello"), se redujo el abdomen ("ya no uso faja"), se recogió los párpados ("porque con los años se caen y eso te provoca un poquito de vejez") y que hasta se permitió el "extra" de recortarse las orejas ("con el tiempo se caen, sobre todo las mujeres que usamos grandes aros").


La nueva fisonomía de la opinóloga fue desmenuzada por el panel del matinal, quienes no se guardaron comentario alguno delante de las cámaras. "Yo tenía la guata menopaúsica, dura como palo", explicó Maldonado. "Yo me acuerdo que tenías la pechuga y después te salía la guata, que era más grande que tus pechugas", fue la innecesaria acotación de Viñuela, al borde del mal gusto.


La opinóloga complementó su operación con un completo cambio de look, partiendo por una cabellera en tono lila, maquillaje a cargo de Gonzalo Cáceres y ropa para su nueva talla 48.


"Quería hacerme estos retoques para verme un poco mejor, no como esas viejas patéticas que se operan y quedan estiradas", dijo Maldonado sin explicar a quién se refería, pese a la insistencia del panel.


Luego, a lo suyo, esta vez para adentrarse en la detención del padre de las gemelas Campos por supuesto abuso sexual, en su estilo directo y sin eufemismos. Porque, le guste o no, el pack de cirugía de Maldonado no incluyó a la lengua: ese músculo de la opinóloga sigue igual de filudo y cizañero que antes de entrar a pabellón.

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