Woody Allen pasea por Roma buscando locaciones para su nueva película

ROMA.- El cineasta estadounidense Woody Allen pasea en estos días por las calles de Roma, en busca de locaciones para su nueva película, "The Bop Decameron", que se empezará a grabar el próximo 11 de julio en la Ciudad Eterna.

El director norteamericano, vestido con pantalones de color beige y un sombrero verde de pescador, quiso inspeccionar con un pequeño equipo de colaboradores algunos lugares muy conocidos de la capital italiana, como el Campidoglio.

Este edificio, situado sobre una colina romana, viene precedido de una escalinata y una plaza diseñada por el artista italiano Miguel Ángel.

"Estas vistas son un espectáculo, un sueño. Son fantásticas, de verdad", señaló Allen cuando estaba asomado a uno de los balcones del Campidoglio romano, según recogen los medios italianos, que también recuerdan que ésta es la primera vez que el estadounidense ambienta una película en Roma, después de haberlo hecho en otras grandes ciudades europeas, como Londres o Barcelona.

No obstante, Allen conocía ya el interior del Campidoglio, porque en 2002 tocó allí el clarinete con su banda New Orleans Jazz Band Live.

Otro de los lugares visitados por Allen y sus colaboradores fue el "gueto judío", un céntrico barrio de la capital italiana, cercano al Tíber, que destaca por sus calles estrechas y sus pequeñas plazas.

Este viernes el director se ha dedicado a visitar una escuela de cine romana, el Centro Experimental de Cinematografía, en el que aconsejó a los jóvenes alumnos dejar de lado las reglas y seguir el instinto de cada uno.

"Chicos, sigan su instinto, intenten entender qué cosas necesitan, olvídense de las críticas o de las cosas que les digan en la escuela y sigan hacia delante", comentó Allen, quien reconoció que "el resto es suerte".

Los medios italianos aseguran que el cineasta permanecerá en Roma para rodar la película hasta finales de agosto —junto a actores como la española Penélope Cruz—, y recuerdan que Allen declaró hace unos meses que esta obra pretendía ser "un homenaje a Fellini y a otros grandes directores italianos".

Por eso, en el reparto habrá también varios actores italianos, entre los que destacan Roberto Benigni, Alessandra Mastronardi y Riccardo Scamarcio.