BEIJING.- La madre del artista y disidente chino Ai Weiwei hipotecó su casa de Beijing para ayudar a pagar la multa de 2,3 millones de dólares exigida a su hijo por la supuesta evasión fiscal que le han impuesto, mientras sus simpatizantes siguen enviándole donaciones a través de Internet.
"Lo único que puedo hacer es usar mi casa. Voy a hipotecarla, y luego la subastaré. Quiero resolver esta deuda", dijo la madre del artista, la poetisa Gao Ying, de 79 años y viuda del venerado poeta revolucionario Ai Qing.
En un comunicado difundido hoy por la ONG Human Rights in China (HRIC), Gao asegura: "puesto que Ai Weiwei no podrá pagar, como su madre, tengo que ayudarle. Mi pensión mensual no es mucho, sólo unos pocos miles de yuanes, este dinero no puede salvar ni a mi nuera ni al resto de amigos".
"Quiero que mi hijo sea libre. No quiero que se lo lleven de nuevo las autoridades, ni a él ni a mi nuera, Lu Qing, ni al socio de Ai, Liu Zhenggang, ni al contable, que pueden estar implicados", afirma la anciana.
El diseñador del estadio olímpico de Beijing fue detenido en abril pasado ilegalmente durante 81 días, tras los cuales fue liberado a condición de no abandonar la ciudad, no conceder entrevistas a la prensa ni publicar opiniones en internet.
Las autoridades acusaron entonces a Ai de evasión de impuestos, aunque tanto el acusado como sus familiares y seguidores aseguran que el motivo real es una represalia por su abierta oposición al régimen del Partido Comunista de China (PCCh).
"Las autoridades de pronto hablaron de delitos económicos para justificar lo que hicieron. Cuando se llevaron a Ai, no encontraron actos subversivos, ni conexiones con la 'Revolución Jazmín" (un intento por emular la "Primavera Árabe" en China), según Gao.
"Así que no tuvieron otra alternativa que usar el 'delito económico' como explicación después de que fuera liberado. Ahora dicen que es 'evasión de impuestos'. Primero hablaban de 20 millones de yuanes, luego de 25 millones y ahora son 15,2 millones. ¿Cómo pueden cambiar tanto las cifras?", prosigue la madre del artista.
Las autoridades aseguran que Ai, de 54 años, confesó sus delitos durante su encierro, lo que, según la progenitora, "es absurdo", pues su hijo "nunca fue formalmente arrestado ni acusado, ¿qué tipo de delito podía confesar?".
Gao Ying recuerda que las autoridades empezaron a amenazar a Ai Weiwei cuando llevó a cabo una investigación independiente sobre el desplome de escuelas durante el terremoto de Sichuan en 2008, en el que murieron miles de niños, vinculando los derrumbes con la corrupción.
"Soy china. Quiero vivir con dignidad. Si el país no está bien gobernado, los chinos somos deshonrados. Espero que mi país disfrute de libertad, justicia, ley, y que la gente pueda disfrutar de seguridad. Como madre, eso es lo que pido, pero creo que no lo conseguiremos", concluye la poetisa.
Mientras tanto, prosigue la desafiante campaña por parte de los simpatizantes del artista para ayudarle a pagar la multa antes de la fecha prevista, el 15 de noviembre.
Según informan en internet los organizadores de la campaña, los "créditos" totalizan ya casi 6 millones de yuanes (945.000 dólares), más de una tercera parte de los 15,2 millones de yuanes de la multa.