''''La idea era que la película luciera igual de buena, si no mejor, que la primera'', dice el director.
EFELOS ANGELES.- Esta semana el director británico Michael Bassett estrenará una nueva película inspirada en el videojuego "Silent Hill", en el que una joven dominada por misteriosas fuerzas visita un pueblo embrujado lleno de monstruos y desafíos que superar.
En "Silent Hill: Revelation 3D", Heather (Adelaide Clemens) queda atrapada en el mundo demoníaco de Silent Hill, un pueblo fantasma donde se confunden un fanático culto religioso y poderosas fuerzas del mal.
"Esta película es muy distinta a cualquier otra película de terror", asegura el realizador, quien explica que se direfencia de otras cintas de terror estrenadas recientemente, citando "Actividad Paranormal 4" y "Sinister".
"Las dos tienen lugar en una casa, son buenas películas de terror y dan miedo, pero 'Silent Hill' despliega un gran lienzo: tiene un montón de efectos especiales, un montón de monstruos y ocurre en un mundo completamente desconocido", afirmó.
La primera adaptación cinematográfica de "Silent Hill" cosechó críticas mixtas, sobre todo por la complejidad de su mundo de videojuego (se siente el pulso de los "niveles"), pero los críticos alabaron por consenso su arte y fotografía. "No puedo describir la trama de esta película", redactó entonces el crítico Roger Ebert. "Sólo puedo decir que es una cinta increíblemente guapa".
El director Bassett dijo que "no tenía razones" para modificar la ya elogiada atmósfera de la primera parte, dirigida por el francés Christophe Gans. "Sólo puse mi propia sensibilidad a ese mundo, que posiblemente es ahora un poco más oscuro, más intenso, más macabro".
"La idea era que la película luciera igual de buena, si no mejor, que la primera, con estos nuevos elementos", dijo, mencionando además el rodaje en 3D para "meter a la audiencia en este horripilante lugar".
Para el cineasta, que dirigió otros dos filmes de terror, ("Deathwatch", 2002; "Wilderness", 2006), el mayor desafío fue "asegurar que una nueva audiencia la apreciara; y a la vez que la audiencia que ya tiene (la franquicia) no se aburriera porque conocía la historia".
Pero se distanció de la primera porque trató de no seguir la "noción de niveles", dijo. "Igual que en un juego, sí hay la sensación de una escalada, de que las cosas se van poniendo más difíciles, pero eso es algo que ocurre en todas las historias, no sólo en los videojuegos. Así es como tiene que ser una película: para los personajes tener éxito se va haciendo más difícil".
"Lo que me gusta es tratar de tener monstruos lo más reales posibles", usando disfraces y maquillaje, cuenta Bassett. "Porque me gusta que (los monstruos) estén en el set, que los actores puedan tener algo con qué relacionarse".
En general, los monstruos son agregados en la posproducción, por lo que los actores no interactúan con ellos durante el rodaje.
En cambio, aquí "hay un solo monstruo digital, todo lo demás es real. Traté de mantener 'Silent Hill' lo más real posible, aunque los monstruos sean horripilantes; porque cuando se acercan a lo humano, y no lo son, meten mucho más miedo".