''Estoy dispuesto, me encantaría ir, creo que estoy en el momento, tengo la madurez para ir'', dice Becerra sobre sus opciones para Viña 2015.
El MercurioSANTIAGO.- "Son sentimientos encontrados", dice Gustavo Becerra a la hora de definir su actual momento. El actor y comediante, conocido por encarnar en un spot publicitario al ya célebre "Guatón de la Fruta", se encuentra en plena etapa de duelo por el cierre del proyecto que impulsó en los últimos años: El Teatro Alcalá.
El recinto que funcionó hasta el 27 de diciembre en el Barrio Bellavista, debió cerrar sus puertas tras la venta del inmueble en que operaba, pero Becerra, su director, optó por no echarse a morir.
"Yo me quiero salir de ese típico discurso de los actores, de que nadie apoya la cultura. No hay ningún tipo de política cultural en este país, y hay que asumirlo y actuar a partir de ello. Nadie te va a venir a ayudar, y la pasada por el desierto la tenemos que hacer los artistas. Nuestras organizaciones tienen que tratar de hacerlo lo mejor posible", sentencia.
Por ello, ya tiene definido el plan de acción con que mantendrá andando a toda la maquinaria de Alcalá en los próximos meses, aunque ello no es lo único que ocupa su atención en estos días.
Porque el actor, además, ya recibió la llamada de los organizadores del Festival de Viña del Mar, quienes hoy lo tienen en la mira, como una especie de semifinalista, para integrarse al apartado humorístico de la edición 2015.
"Son sólo conversaciones, me han pedido material, no hemos pasado a precontratos ni nada de eso, pero estoy en un grupo de comediantes que podrían ir a Viña y a mí, personalmente, me encantaría ir", dice Becerra, reconociendo que el suyo figura en una lista de aproximadamente cinco nombres, es decir, una cifra superior al total de cupos que tras las confirmaciones en el humor quedaron disponibles (tres).
Ante la posibilidad, el actor —quien lleva varias temporadas desarrollándose en la escena local de stand up comedy— muestra fe y ganas. "Yo estoy en el mejor momento para ir. Espero que no suene soberbio, pero creo que de alguna forma soy la herencia lógica que deja Jorge Alís", afirma. Precisamente de la mano del argentino, cuenta, se inició en el stand up hace cerca de una década.
"Creo que tengo la capacidad y las horas de vuelo para hacer una rutina de stand up comedy en Viña. Estoy dispuesto, me encantaría ir, creo que estoy en el momento, tengo la madurez para ir, he estado metido en el humor hace bastante tiempo... Creo que tengo las condiciones artísticas para ir", reitera.
Sobre las fortalezas de sus rutinas, asegura que la propia dinámica del stand up y su situación ante la audiencia le dan un buen punto de partida: "Esto es algo muy contundente, uno se desnuda, cuenta sus verdades, y yo tengo este conflicto de que la gente conoce más al 'Guatón de la Fruta' que a Gustavo Becerra".
Pero se concrete o no esa opción, el actor ya tiene claro que su gran norte para el año que comienza es mantener en pie a las producciones de Alcalá. "No pretendemos salirnos de la actividad cultural. Estaremos en Mori Vespucio, San Ginés y Teatro Bellavista. No vamos a bajar los brazos. Es cierto que no vamos a tener casa, pero vamos a tener hogar. Queremos tener casa, pero un espacio propio, donde nosotros definamos la línea. No hay apuro. Si tenemos que esperar, vamos a esperar", dice.
Por lo pronto, ya hay un itinerario definido: La obra "Mujeres al rojo" y el musical infantil "El amor de Gordelio" se mantendrán en funciones en Mori Vespucio, mientras que "Top Model" lo hará en el Teatro Bellavista. Con la agrupación Frente Humorístico Nacional (Funa), en tanto, el propio Becerra se embarcará en una gira nacional durante la temporada de verano.