Mark Osborne se muestra feliz tras el estreno de ''The Little Prince''.
AFPCANNES.- El director Mark Osborne, responsable de cintas como "Kung fu Panda" (2008), presentó este viernes en Cannes su personal lectura de "El Principito", una de las obras más universales de la literatura, y que esta vez se aborda a través de los ojos de una niña que se resiste a que los adultos le roben la infancia.
Ésta es la primera vez que el cuento de Antoine de Saint-Exupéry llega a la gran pantalla en forma animada. En ello incidieron las dificultades que tiene esta historia para ser llevada al cine, dado su arraigo en el público y su universalidad. Por ello, Osborne opta por "inventar una historia en torno al cuento", lo que le llevó a decidir que El Aviador (Jeff Bridges) sobreviviera para contar su historia.
Ya viejo, rodeado de cachivaches y recuerdos, pasa el tiempo intentando poner a punto un avión con el que pueda volver a tocar las estrellas, que cada noche observa desde su telescopio.
Osborne pone en el centro de su filme a "La niña" (voz de Mackenzie Foy), a quien su madre (Rachel McAdams) le ha organizado cada minuto de su vida con el fin de prepararla para una brillante carrera en el mundo de los adultos. Pero El aviador, su excéntrico vecino, le envía un avión de papel hecho con una página de El Principito, y altera los cuidadosos planes de la madre.
A través de sus grandes ojos, la niña descubre la infancia que los adultos intentan robarle. Sobre todo, la empatía y la importancia de las relaciones humanas.
El viejo aviador va entregando día a día a su vecinita un capítulo de la historia de El Principito, al que encontró cuando su avión se averió en el desierto del Sahara. Así, poco a poco ella se va transformando.
"Todo es posible, sólo hay que creer en ello", recalca el filme de una hora y 47 minutos, que puede ser visto tanto por pequeños como por adultos.
"Quería que el filme hablara de la manera en que el libro puede cambiar nuestras vidas, y no adaptar cada página. Quería conseguir un equivalente cinematográfico de esta experiencia emocional", en alusión a lo vivido por Osborne ya de adulto, con la lectura del cuento de Saint-Exupéry, una de las obras literarias más universales y traducidas de todos los tiempos.
La película es tanto para los amantes del libro de Saint Exupéry como para los que no lo conocen y lo quieran descubrir, contó Osborne en la conferencia de prensa posterior a la proyección del filme en Cannes, fuera de concurso.