Los Tres y su disco "Coliumo": "Es nuestro Álbum Blanco de Chiguayante"

SANTIAGO.- Un barco que navega en un mar de llamas en el anverso y un bote pesquero encallado en los cerros al reverso ilustran el séptimo disco de Los Tres, titulado Coliumo y dedicado, según las notas de introducción en el folleto, “a la Octava Región y a todas las víctimas del terremoto del 27 de febrero de 2010”.

Coliumo, vecina de Dichato y Pingueral, es una las localidades en la línea costera que si alcanzó a soportar el remezón de la tierra de 8.8 grados, fue finalmente arrasada por el tsunami que vino poco después.

“Toda Concepción esta aún en el suelo. La ciudad retrocedió diez años con el terremoto. Y lugares como Coliumo quedaron muy devastados”, comenta en la conferencia de prensa de lanzamiento Álvaro Henríquez, compositor y cantante de Los Tres, quien luce un perfecto peinado retro a lo Johnny Cash. “Pero no se trata de usufructuar del dolor sino de mostrar lo que ocurrió y decir que hay esperanza. Dichato y Coliumo siguen siendo lugares muy bellos”.

El grupo se fundó en Concepción en 1987 y la vuelta a las raíces no sólo tiene que ver con palabras como Coliumo. El nuevo disco también supone un regreso a la banda de rock and roll y rockabilly de los inicios en discos como el cinco estrellas Los Tres (1991).

“Volvimos al formato de cuarteto a dos guitarras, bajo y batería”, anota Ángel Parra, el guitarrista del grupo. “El hecho de que no haya un relleno de acordeón o piano en la banda te hace ser más responsable de la música que estás tocando. Siempre trabajamos con cintas. Aquí no hay un mouse para corregir lo que no quedó bien”, dice sobre el sucesor de Hágalo usted mismo (2006).

Coliumo fue grabado en los estudios Dreamland de Woodstock, mezclado en Brooklyn y contó con la producción de Joe Blaney, quien ya había trabajado con Los Tres en el disco Fome (1997). “Es un disco muy completo del estilo de Los Tres, porque abarca toda la paleta de música. Es muy orgánico y bien representativo del momento en que estamos pasando como músicos y como amigos. Joey lo considera mejor que el Fome, que se supone que es el más importante que hicimos”, apunta Henríquez.

-Fome era un trabajo muy oscuro. ¿Éste cómo lo ven?
Henríquez: Es lo opuesto al Fome. Igual hay canciones duras, no diría oscuras, pero sí bien crudas. Coliumo está más arriba. En Fome quisimos explorar el subsuelo, pero aquí salimos hacia arriba. Tiene canciones de ficción como “El hocicón” o “Cárcel, hospital & cementerio".

-Dijeron que era como el Álbum blanco de Los Beatles...
-Henríquez: Eso sería un poco “musho”. Era Joey Blaney el que nos decía todo el tiempo que era como el Álbum blanco. Yo diría que lo es, pero en relación a la historia del grupo, no a la música en general. Es nuestro "Álbum blanco de Chiguayante". Las canciones salieron sin pensar mucho, salieron muy rápido. Las hacíamos, nos gustaban, la ensayábamos y las grabábamos en Estados Unidos. Salieron muchas canciones y no dejamos ninguna afuera.

La alegría y la vergüenza

Los Tres inician este 11 de noviembre una nueva gira nacional con ocho fechas a lo largo del mes unirá los extremos de Puerto Montt (17 de noviembre, en Arena Puerto Montt) e Iquique (26 noviembre, en la Casa del Deporte). La primera fecha es en la tierra natal del grupo. El jueves 11 actúa en Suractivo de Concepción.

El resto de los conciertos van a Rancagua (13 de noviembre, en el Mall Portal Rancagua), Temuco (18, en el Gimnasio de la Ufro), Santiago (20, en el Mall Florida Center), La Serena (24, en el Gimnasio Coliseo) y Antofagasta (27, en el Gimnasio Sokol). Todas las entradas a estos conciertos serán con un “combo ticket + disco”.

“Estamos ansiosos de ensayar la música. Estuvimos metidos grabando en diez días, tiempo récord para tanta música, y lo que más queremos ahora es tocar y escuchar cómo suena. Estamos tocando ‘Shusha’ en vivo pero hay tantas canciones maravillosas que es muy entretenido. Que empiece ya", dice Roberto "Titae" Lindl, el bajista.

-¿Por qué "Shusha"?
Henríquez: Porque fue la primera canción que salió. Tenemos muchos temas más para lanzar, así que lo tomamos con calma. Empezamos con “Shusha”, que es piola, y representa muy claramente cómo es este disco, que tiene muchas guitarras en ese estilo.

-Participaste en “A la mina no voy”. A propósito de los mineros, ¿cómo les toca a ustedes todo esto que ha pasado?
Henríquez: Hay dos cosas bien importantes. Una es que indudablemente uno siempre espera que situaciones tan peligrosas y terribles como ésta lleguen a buen puerto, que fue lo que ocurrió en definitiva: que pudieron salir los mineros, y creo que todo Chile y el mundo se alegra de eso. De lo que yo no me alegro, de lo que me avergüenzo, es del circo que se hizo al respecto. Los medios de comunicación en Chile tienen enfermo a Chile entero. Eso pasa también por un tema de Piñera, de un gobierno que es archimediático. Un gobierno que toma provecho, como por lo general lo hace la derecha en el mundo, de situaciones como ésta. O sea, a mí me da vergüenza ver a Piñera mostrando el papelito de "Estamos a salvo" en Inglaterra. Es como, por favor. El tipo quiere tener el crédito de todo. O sea, yo creo que le faltó para agarrar la pala mecánica y sacar a los mineros él mismo (risas).
Lindl: Sí, él quería bajar.
Henríquez: Cómo te dijera, es muy contraproducente para un país cuyo pueblo... siempre hablo de la gente chilena, de la clase trabajadora, que es una maravilla, hemos tenido la suerte de tocar para todos ellos, y es un público muy buena onda, gente inteligente, chispeante, que con esta forma de hacer crecer la ignorancia de parte de los medios de comunicación de Chile creo que es vergonzosa.