Las claves de la audiencia preliminar en el caso Michael Jackson

SANTIAGO.- El médico de Michael Jackson, Conrad Murray, acudirá hoy a una audiencia preliminar   en el proceso judicial que busca investigar la muerte del "rey del pop", puesto a que se le acusa de haber asesinado al cantante el 25 de junio de 2009, al administrarle sedantes durante las preparaciones del tour "This Is It".

En la audiencia se pretende entrevistar a 30 testigos, para ver si la fiscalía tiene suficientes pruebas para enjuiciar a Murray.

Los antecedentes

Murray, contratado por la productora AEG  debía velar por la salud de Jackson, quien realizaría una extenuante racha de 50 conciertos en el O2 Arena de Londres. Testigos cuentan que Michael tenía problemas para dormir y dolores crónicos que le obligaban a tomar altas dosis de sedantes para poder conciliar el sueño y Murray era quien se los administraba.

Previo a la audiencia preliminar, ha existido una gran especulación sobre quienes serán los testigos. Solamente se sabe que irán expertos de la salud y gente que estuvo cerca de Michael en sus días finales para que testifiquen sobre su estado antes de morir.

La fiscalía

El argumento de la fiscalía es que el doctor Murray mató a Jackson, administrándole una alta dosis de Propofol y luego lo dejó solo por casi 50 minutos, siendo que la droga es extremadamente fuerte y que solo puede ser administrada bajo supervisión y monitoreo constante.

Trascendió que en la preliminar no se llamará a nadie de la familia Jackson. Kenny Ortega,  director de "This Is it", será el testigo clave para la fiscalía. Ortega argumentará que Michael se había recuperado de su frágil estado los días anteriores a su muerte, por lo que esta habría sido causada por Murray.

La defensa

Por su parte, la defensa argumentará que Jackson se encontraba débil debido a los extenuantes ensayos, en mala condición, deshidratado y privado de sueño. Según ellos, su causa de muerte sería que en un momento de frustración al no poder dormir, se inyectó el mismo la dosis fatal de Propofol, induciendo su muerte, mientras el doctor Murray no estaba en la habitación.

Lo más probable es que la defensa de Murray se dedique más que nada a escuchar en busca de errores en la argumentación de los testigos, puesto que es casi seguro que el caso irá a juicio.