El año pasado, músicos del Teatro Colón protestaron tocando a las afueras del famoso centro musical.
EFE
BUENOS AIRES.- La aparición de partituras de coro y orquesta de famosas óperas en una bolsa de residuos del Teatro Colón, una de las salas líricas más importantes del mundo, desató hoy un escándalo en Argentina, según fuentes oficiales y gremiales.
Nicolás Rupani, un "cartonero" de 23 años, descubrió el jueves, entre desechos, cuadernillos de obras como "Aída", "Il Trovatore" y "Falstaff", de Giuseppe Verdi, además de "El Barbero de Sevilla", de Gioacchino Rossini y "El murciélago", de Johann Strauss.
"Es una situación terrible. Son originales. Fueron encontrados, gracias a Dios. Realmente asombra", declaró a la AFP Carlos Flores, delegado de los empleados del Colón.
"Ponemos absolutamente en duda que sean originales. Son fotocopias. Es absurdo que se guarden todas las copias de conciertos que usan los músicos en los atriles. Tirarlas es normal", señaló con vehemencia a la AFP una fuente del Colón que pidió reserva de identidad.
El descubrimiento se produjo en medio de la tensión entre el personal del Colón que reclama ejercer su derecho de huelga y la comuna de Buenos Aires, en manos del alcalde derechista Mauricio Macri.
El conflicto amenaza la temporada 2011, luego de las medidas de fuerza aplicadas por músicos, bailarines y cantantes que forzaron la suspensión de las últimas funciones de la temporada de 2010 con reclamos de mejores remuneraciones.
"Hubo despidos y sumarios internos. Hay gente en el teatro sin historia en la vida lírica o teatral o sinfónica. Así es como se produjo este desatino de tirar material de enorme valor como las partituras", agregó Flores.
En cambio, la fuente oficial dijo que "se investigará porque las copias sin uso deben ser destruidas o donadas a escuelas de música. Los originales están guardados en el archivo".
El Colón, célebre por su acústica, fue reabierto el año pasado, en ocasión de celebrarse el Bicentenario de la Revolución de Mayo que abrió el camino a la independencia de la nación sudamericana, tras casi cuatro años de restauraciones.
La sala fue inaugurada en 1908, con la ópera Aída, y pasaron por su escenario Strauss, Igor Stravinsky, Manuel de Falla, Arturo Toscanini, Zubin Mehta, Daniel Barenboim y Herbert von Karajan, entre otros.
Cantaron en el Colón personalidades como Enrique Caruso, María Callas y Monserrat Caballé.