Arjona desclasifica los episodios menos glamorosos de su paso por las discográficas

SANTIAGO.- "No sé bien cómo me irá, pero seguramente más difícil no será", dice Ricardo Arjona en la apertura de su etapa como independiente. Luego de años vinculado a las disqueras, el guatemalteco decidió dejar la industria tradicional, para editar por sí mismo su próximo disco, que ya ha sido adelantado a través del single "El amor".

La aventura motivó al cantautor a repasar sin tapujos su trayectoria grabando discos, a través de una carta abierta que difundió esta jornada. "Grabé un primer disco impresentable que fue editado en cuanto país pudo aparecer. Por suerte este año recuperé los derechos para que el que no se haya enterado, no se entere jamás que existió", recuerda sobre su primer registro.

Con la misma transparencia, reconoce que armó maletas a México en busca de la oportunidad que buscaba, pero allí debió estar "casi tres años indocumentado, desempleado y rechazado por todas las compañías de discos, hasta que empecé a escribir para otros y un par de mis canciones se hicieron conocidas".

Su primer contrato tampoco fue firmado de la manera más elegante: "Entré a mi primer compañía de discos por canje, un amigo productor les dijo que si no me firmaban a mí no iban a firmar a dos artistas que él tenía, y así los obligó".

De ese modo, sus más exitosos discos fueron los que menos ganancias porcentuales le reportaron: "Mi primer contrato lo firmé en blanco y me generaba, después de todo, menos del 1% de regalías. En esas condiciones saqué discos como Animal nocturno e Historias, que dicho sea de paso son los dos discos que más copias han vendido en mi carrera".

Así fue como se le ocurrió apelar a un vacío en su contrato que no le impedía cantar temas de otros, y amenazó con grabar su siguiente disco sin ninguna canción propia. "Decidieron entonces cambiarme el contrato y hacerme uno nuevo. En esa negociación el manager que tenía me estafó, se quedó con gran parte del contrato", cuenta.

"Hoy sigo haciendo lo mismo que al principio, aunque ya no tengo disquera. Hoy, si quiero quejarme por algo, lo tendré que hacer conmigo mismo", dice sobre su sello propio, al que llamó Metamorfosis. Al alero de éste fue que registró su nuevo disco, que califica como "el mejor de mi vida".

El álbum, que sucede a Poquita ropa, aún no tiene nombre ni fecha de salida al mercado, aunque se espera que suceda en las próximas semanas. En esa labor de todos modos trabajará en alianza con un sello tradicional, ya que encargó a Warner las labores de distribución internacional.