SANTIAGO.- La ministra de Educación, Mariana Aylwin, dijo que el Departamento de Evaluación, Medición y Registro de la Educación (DEMRE) se comprometió hoy a poner todos los antecedentes en manos de la justicia sobre la filtración de los puntajes del test, que este año fueron puestos en Internet con más de 40 horas de anticipación.
"Ciertamente lo que pasó es un delito, pese a que están poco regulados porque son temas nuevos", indicó la autoridad.
Por su parte, el subsecretario de la cartera, José Weinstein, afirmó que el hecho fue benéfico, ya que se basó en datos reales y que si no hubiese sido así se habría producido un caos para la universidad, alumnos y apoderados.
Lo anterior, significó que más de 25 mil jóvenes conocieran sus resultados antes que el resto por medio de la dirección www.piscola.org.
Mariana Aylwin señaló que el DEMRE tomó todas las precauciones para que no existiera ninguna filtración y que no hubo una adulteración de la información.
De igual forma, la autoridad puntualizó que a través de la línea 800 dispuesta por el Ministerio se recibieron llamados de alumnos que dijeron no aparecer en los listados de puntajes publicados por el diario La Nación, lo que se resolverá hoy y se derivará al DEMRE.
Por otra parte, hasta ese departamento llegaron cerca de 50 jóvenes a reclamar por eventuales errores en sus ponderaciones y puntajes.