ESTRASBURGO.- Un ferviente llamado a unirse contra la pena de muerte a todas las naciones que aún mantienen en sus legislaciones la pena capital, y a establecer en el intertanto una moratoria de las ejecuciones pendientes, hizo el presidente del Senado, Andrés Zaldívar, al intervenir en Estrasburgo, en la sede del Parlamento Europeo, en la reunión de presidentes de parlamentos.
En nombre del Congreso chileno, Zaldívar aseguró que la comunidad internacional tiene el imperativo ético de eliminar la pena de muerte del ordenamiento jurídico de las naciones, porque "el respeto a la vida debe primar sobre cualquiera consideración".
Acompañado del senador Juan Hamilton, autor de la moción que se convirtió en ley el 28 de mayo último, y que permitió a Chile incorporarse a los países que han abolido la pena de muerte, Andrés Zaldívar sostuvo ante los eurolegisladores que "esta medida representa el compromiso de Chile con la vida y con el respeto a la dignidad intrínseca del ser humano".
Valoró la participación de nuestro país en la asociación de naciones "Unidos contra la pena de muerte" y formuló un llamado a una miratoria mundial de las ejecuciones como una etapa en el camino de la abolición mundial de la pena de muerte.
Enfatizó que no existen razones válidas para su aplicación por parte de los sistemas judiciales, ni razones políticas ni culturales que justifiquen su aplicación, porque la vida humana es sagrada.
La intervención del senador Zaldívar culminó en medio de aplausos cuando recordó a la célebre cantautora Violeta Parra, que exclamaba en una de sus canciones "gracias a la vida que me ha dado tanto, me ha dado la risa y me ha dado el llanto. Gracias a la vida".