SANTIAGO.- A cinco días de la huelga de brazos caídos que realizan los funcionarios del Servicio Médico Legal (SML), un grave riesgo sanitario afectaría a las dependencias de este recinto, debido a la falta de asepsia en las autopsias a los cadáveres que han sido derivados en los últimos días a la morgue.
Similar situación se produciría en las demás reparticiones del país, ya que el personal destinado por la dirección del SML para reemplazar, en especial, a los tanatólogos y auxiliares médicos que se adhirieron de forma solidaria a la movilización, "es a todas luces insatisfactorio".
Así lo confirmó hoy a UPI una fuente del organismo dependiente del Ministerio de Justicia -quien pidió mantener en reserva su identidad para evitar posibles represalias-, aduciendo que "por ejemplo, se destinaron sólo dos auxiliares médicos del departamento de anatomía normal de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, sin ninguna experiencia en el campo para ayudar a la doctora que está efectuando la mayoría de las autopsias, la que viene recuperándose de una tuberculosis, por lo que todavía está ingiriendo medicamentos".
La misma fuente sostuvo que "hay graves riesgos biológicos y sanitarios, ya que el personal que está trabajando es insuficiente y no está capacitado para cumplir con dichas labores. Además, no pertenecen al servicio, no están utilizando la ropa adecuada, no se protegen en forma correspondiente y, ante cualquier herida por un corte en sus manos, podrían adquirir alguna enfermedad".
Explicó a UPI que "esto se da porque durante el procedimiento tanatológico se va mezclando la sangre, bilis y otros fluidos, los cuales, debido a la mala manipulación, aumentan peligrosamente las posibilidades de contagio para estas personas.
También se ve afectada toda la comunidad del servicio y los deudos que van a retirar a sus seres queridos, porque algunos féretros no son herméticos ni reciben un tratamiento profiláctico, lo que permitiría que estos fluidos se viertan hacia afuera, contaminado el ambiente.
Precisó que las enfermedades que rondan al servicio, debido a que los cadáveres que llegan sin un diagnóstico, son por lo general el SIDA, Hepatitis B-C y D, Meningitis Meningocócica y Virus Hanta, "principalmente porque no se está haciendo el aseo diurno que se requiere en la sala de tanatología ni se está ocupando el instrumental quirúrgico sofisticado que cada tanatólogo y auxiliar necesita para realizar una autopsia".
Es así que incluso personal de una empresa externa de aseo, destinada a la limpieza de las oficinas del SML, "en estos momentos efectúa la desinfección del laboratorio, con un grave riesgo para ellos. Aquí solo se utiliza, por ejemplo, un paño mojado, sin siquiera utilizar cloro u otro tipo de desinfectante de alto poder".
Otro problema que aqueja al SML, "es que la doctora que está efectuando las autopsias en los hospitales y postas, está becada en medicina legal por lo que aún no tiene el permiso para cumplir con dichas labores. A esto se suma que algunos recintos médicos -como la Posta Central- no cuentan con salas para realizar las pericias forenses", indicó la fuente a esta agencia.