SANTIAGO.- El país no retomará en el corto plazo el nivel de plantaciones forestales anuales registrado a inicios de la década del 90, cuando incluso se superó las 130.000 hectáreas al año, afirmó el titular del Instituto Forestal y director de Bosques para Chile, José Antonio Prado.
Prado sostuvo que lo anterior si bien preocupa, no constituye un problema, considerando que Chile tiene una muy buena capacidad de abastecimiento de madera, pero "sí impone a todos los chilenos un desafío importante, porque existe el potencial de aumentar, en un tiempo razonable, los dos millones de hectáreas actuales de plantaciones a tres o, incluso, cuatro millones". Además, sostuvo que hay más de 20 millones de hectáreas erosionadas a lo largo de todo el país, la mayoría de las cuales son recuperables mediante la forestación.
En vista de esta tarea país -por la contribución de esta actividad forestal a la preservación del medio ambiente y la generación de empleos (más de 330.000 entre directos e indirectos)-, el director del Infor resaltó la alianza de más de 120 organizaciones públicas, académicas y empresariales en torno a Bosques para Chile.
Esta iniciativa comenzó recientemente su campaña 2001-2002 para dar a conocer la realidad de este sector, fomentar en todo el país la forestación, e incentivar el cuidado y respeto del bosque. Entre los planes de Bosques para Chile destaca la donación árboles nativos y ornamentales a las comunas más desforestadas y con mayor contaminación del país, la que se materializará entre agosto y diciembre próximo, y que se extenderá hasta el año 2004.
Prado destacó, además, los esfuerzos que realiza el Gobierno para fomentar la forestación en los pequeños y medianos empresarios, a partir de las modificaciones realizadas en 1997 al Decreto 701 para el otorgamiento de bonificaciones a las plantaciones. "Durante este año CONAF (Corporación Nacional Forestal) ha realizado cambios a esa normativa, que mejorarán aún más los incentivos en ese sector", declaró.
Al comentar las causas que explican por qué el ritmo de plantaciones está por debajo de los niveles de inicios de la década pasada, el director del Infor mencionó el encarecimiento del precio de los terrenos en el país; la menor disponibilidad de grandes extensiones de fundos, que facilitaron en el pasado la creación de bosques; y el menor valor de las tierras y existencia de incentivos en naciones vecinas, como Argentina y Uruguay.
En todo caso, dijo estar optimista de que con la labor conjunta del sector público y privado, el sector forestal fortalecerá su rol fundamental en la economía del país, al situarse actualmente como la segunda actividad económica más importante de Chile después de la minería, en base a un recurso renovable.
Las plantaciones bordearán este año las 100 mil hectáreas, que se compara con las 102.350 registradas en el 2000. El total plantado durante el año pasado ascendió a 2.054.638 hectáreas, contra 13.403.561 hectáreas de bosque nativo.