SANTIAGO.- Sólo a fines de abril de 2002 el vertedero de Lepanto, ubicado en la comuna de San Bernardo, dejará de funcionar "a todo evento" y no a fines de diciembre de 2001 como se había anunciado a mediados del presente año.
Así lo informó el intendente metropolitano, Sergio Galilea, junto al director del Servicio de Salud Metropolitano del Ambiente (Sesma), José Concha, y al director de la Comisión Nacional del Medio Ambiente (Conama) de la Región Metropolitana, Guillermo Díaz, quienes se reunieron con los ejecutivos de Emeres, la empresa que tiene los derechos para depositar en el basural, que en forma previa ya había asegurado que a mediados de mayo del próximo año Lepanto dejaría de funcionar.
"En mayo no entra ni un gramo más de basura a Lepanto", afirmó el presidente de la firma, Juan Peribonio, quien además precisó que los primeros traslados de residuos, que corresponderían a los de la comuna de Macul, hacia el nuevo vertedero de Santa Marta, en Lonquén Talagante, se iniciarían a partir de la segunda semana de marzo.
En el encuentro afirmó Galilea, los ejecutivos de Emeres plantearon que de acuerdo a la licitación efectuada a mediados de año y en la cual se adjudicaron dos rellenos, Santa Marta y Santiago Poniente, en Maipú, sólo en forma gradual, entre el 15 de marzo y el 30 de abril Lepanto "debería dejar de funcionar".
Al respecto, añadió el intendente, este lunes el Sesma tendrá una respuesta más precisa sobre si definitivamente el basural cuenta con la capacidad para operar durante los próximos cuatro meses y en qué condiciones de descarga lo debe hacer, a fin de ofrecer la máxima seguridad a la población.
Esto, enfatizó la autoridad del gobierno regional, "de ninguna manera implica, ni siquiera provisoriamente, que Lepanto 3 va a ser autorizado", agregando que el funcionamiento provisorio del basural que será dado a conocer en detalles este 24 de diciembre, previa conversación con el alcalde de San Bernardo, Francisco Miranda, "no puede exceder el 30 de abril y tiene que ser a todo evento".
No obstante, para las autoridades de la empresa concesionaria del basural que agrupa a 21 municipios de la región y de acuerdo al cronograma elaborado, el cierre de Lepanto se iniciaría a mediados de mayo de 2002.
"Cumpliendo con las expectativas y considerando los antecedentes proporcionados por los consorcios -responsables de la construcción de cada uno de los rellenos- desde el mes de mayo podamos tener con certeza ni un gramo de basura dentro de Lepanto", afirmó el presidente de la firma, Juan Peribonio.
Asimismo, el alcalde de Cerrillos y presidente del Consejo de Administración de Emeres, Alejandro Almendrares, agregó que la etapa uno de Lepanto cuenta con la capacidad de seguir recibiendo residuos dentro de los plazos establecidos sin que exista "riesgo para la población y garantizando la total seguridad sanitaria".
Además indicó que son los mismos municipios los que deben definir a cuál de los dos rellenos sanitarios llevaran sus residuos, sin que hasta la fecha existan convenios ya fijados entre las respectivas alcaldías y las empresas concesionarias.
Actualmente Lepanto recibe sólo cerca de 85.000 toneladas de basura al mes, cantidad, explicó el doctor José Concha, que le permite lograr de acuerdo a la fecha establecida, el empalme con los nuevos rellenos y evitar una emergencia sanitaria.