SANTIAGO.- La confraternidad de familiares de presos comunes (Cofapreco) presentó esta mañana un recurso de amparo en contra del ministro de Justicia, José Antonio Gómez, y el director de Gendarmería, Hugo Espinoza, con el objeto de solicitar el término definitivo del módulo Alfa del Penal de Colina II, donde el viernes pasado 25 reos resultaron lesionados tras autoinferirse heridas cortopunzantes en protesta por las condiciones de reclusión en que se encuentran.
El abogado de la organización, Carlos Quezada, sostuvo que el módulo 1, también conocido "Alfa" del mencionado penal, no cumple con las condiciones mínimas necesarias para mantener reclusos en su interior.
"Ese módulo se ha convertido en el último tiempo en un verdadero campo de concentración, dejando de ser una cárcel para convertirse en un verdadero centro de torturas en democracia", aseguró el abogado.
El recurso presentado busca que la Corte de Apelaciones se pronuncie al respecto y ponga fin definitivamente a este tipo de recintos que albergan a presos de alta peligrosidad.
Según el profesional, esta unidad tiene como concepto básico 22 horas de encierro continuado de los internos, sin baño, sin luz y acceso a medios de comunicación. Con estas medidas se busca hacer un lavado de cerebro a quienes ahí permanecen.
No habrá variaciones
El sábado, el abogado Hugo Gutiérrez presentó un recurso de amparo en favor de los presos y manifestó que las condiciones de éstos son muy precarias en el recinto penal.
Empero, el Director de Gendarmería, Hugo Espinoza, aseguró que no habrá variaciones en el régimen carcelario del Módulo Alfa, que es "estricto, riguroso y se restringen todos los movimientos y los desplazamientos de los internos". Aseguró que estas "condiciones de vida corresponden al perfil de un reo de alta peligrosidad".
Origen protesta
Según fuentes de Gendarmería, los hechos se produjeron luego que el jueves 17 los vigilantes obligaran a los reos a realizar ejercicios muy rudos, sin la presencia de un profesor de Educación Física. Al negarse, éstos habrían sido golpeados.
Como protesta, los internos decidieron, al día siguiente, autoinferirse heridas cortopunzantes.
Siete presos resultaron lesionados, debiendo ser trasladados al hospital San José, a la Posta Central y al Hospital Penal.
Al hospital San José fueron enviados Óscar Campos Bernal, Javier Flores y Sergio Galleguillos; y a la Posta Central, Arturo Godoy.
Estos cuatro reclusos ayer fueron dados de alta y devueltos al penal.
En tanto, Carlos Vera, Carlos Pino y Carlos Manríquez se encuentran en observación en el Hospital Penal.