SANTIAGO.— El juez Juan Guzmán, que procesó el general (r) Augusto Pinochet por violaciones a los derechos humanos, lamentó el apoyo que le brindó al pronunciamiento que encabezó el ex gobernante en 1973.
"Ahí cometí un pecado. Siendo hijo de un país democrático, me alegré con el 11 de septiembre", señaló Guzmán a la prensa con motivo de los 29 años de la intervención que derrocó al Presidente socialista Salvador Allende.
En un intento por justificar su radical cambio de postura, el magistrado explicó que por la forma en cómo se presentaron los hechos, hubo mucha gente como él que "aceptamos el '11' en aquella oportunidad como algo bueno",
Guzmán procesó el año pasado a Pinochet como encubridor de 75 secuestros y homicidios de prisioneros políticos en la denominada "Caravana de la Muerte".
Tras una larga lucha judicial, en julio de este año la Corte Suprema sobreseyó definitivamente al ex comandante en jefe, por demencia y lo consideró inhabilitado para ser juzgado.
El magistrado sostuvo que su evaluación actual del pronunciamiento militar se observa en su labor judicial.
Guzmán se ha convertido en el principal investigador y juez de las violaciones cometidas por el régimen de Pinochet entre 1973 y 1990. Además de procesarlo por las acciones cometidas por la "Caravana de la Muerte", ha juzgado a otros ex militares por otros hechos y ha indagado en la búsqueda de fosas de detenidos desaparecidos.
