SANTIAGO.- Una dura crítica a las instituciones del Estado y en especial a sus colegas, en lo que respecta a la fiscalización de la corrupción, formuló hoy la presidenta de la Cámara de Diputados, Adriana Muñoz (PPD).
La parlamentaria sostuvo que las conductas demostradas por algunos de sus homólogos la última semana, no son aceptables puesto que el contenido de las denuncias realizadas no se condicen con el rol fiscalizador que los parlamentarios deben tener.
Ello, explicó debido a acusaciones como las que efectuaron los diputados Jaime Jiménez y Cristián Pareto, ambos DC, son parte de un "show business" que se conforma en base a una denuncia sin fundamento que se hace con el único afán de aparecer como auténticos investigadores y denunciantes de irregularidades.
"Esto es muy serio, porque la fiscalización tiene que ver con valores éticos y morales de la acción pública. Hoy día los diputados que aparecen en la prensa una semana seguida son capaces de instalar cualquier tema, a lo mejor son fundamento, yo creo que esa misma preocupación la tomaran y la canalizara a través de la comisión de conducta de la cámara o a través de los organismos pertinentes, le creería más a este afán fiscalizador de mis colegas", enfatizó la legisladora.
Para hacer frente a esta situación, la diputada Muñoz concurrió hasta La Moneda para solicitar al ministro secretario general de la Presidencia, Mario Fernández, que el gobierno de urgencia al proyecto de ley que crea el sistema nacional de control y fiscalización, iniciativa que busca combatir con armas concretas las irregularidades que se cometen al interior de los organismos públicos.
La presidente de la corporación aseguró que con dicho cuerpo legal, que apunta a coordinar la acción de organismos como el Congreso, la Contraloría o el Consejo de Defensa del Estado, en materia de fiscalización y dotarlos de autonomía para actuar y establecer las acciones que correspondan para los diversos casos en que se detecten irregularidades, se podrá eliminar "el virus" que amenaza a las entidades públicas.
"No podemos permitir que nuestras instituciones estén siendo debilitadas porque existen algunas personas miembros de estas instituciones que son portadoras de un virus súper peligroso que es el virus de la corrupción, el cual cuando entra en un sistema lo puede destruir y eso es algo que queremos impedir", sentenció.
