SANTIAGO.- Al referirse al traspaso a la justicia militar de la investigación por la muerte del comunero mapuche Edmundo Lemún, ocurrida el pasado martes luego de cuatro días de agonía, el General Director de Carabineros, Alberto Cienfuegos, reconoció que el balín que causó su muerte fue disparado por efectivos de su institución, quienes -dijo- actuaron en defensa propia.
"Siempre se ha dicho, desde un principio, que los Carabineros fueron emboscados y fueron atacados, y tuvieron que defenderse", dijo el máximo jefe de la policía uniformada al respaldar la labor de los efectivos que acudieron al fundo Santa Alicia, donde se realizaba una toma por parte de comunidades indígenas.
Cienfuegos realizó las declaraciones luego que se conociera que las características del proyectil que hirió en la cabeza al joven mapuche, corresponden a cartuchos de escopetas que usa la policía uniformada, según el informe balístico elaborado por el Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones.
Sin embargo, el informe no ha podido establecer a ciencia cierta si el proyectil fue disparado por una de las dos escopetas antidisturbios que utilizó Carabineros durante los incidentes, aunque estipula que "el proyectil extraído de la cabeza de Lemún es compatible con los cartuchos de escopetas que usa la polícía uniformada".
Al ser consultado si los funcionarios actuaron en legítima defensa, Cienfuegos respondió que "esperamos que así sea, y la investigación judicial, no solamente en este caso, sino que siempre que Carabineros hace uso de las armas, debe determinar si el uso de éstas corresponde a las facultades que tiene Carabineros para usarlas".
Como ejemplo, agregó que "cuando Carabineros hace uso de las armas en legítima defensa, en defensa de terceros, para repeler un ataque o ante la inminencia de un ataque, usando un medio proporcional al ataque, eso es en definitiva lo que se prueba siempre, no solamente en este caso".
"A mí no me extraña que la investigación siga su curso, porque eso es lo que corresponde", sentenció el general.
Comisario de Angol fue trasladado por razones de seguridad
El General Cienfuegos, aclaró hoy que la remoción del comisario de Angol, mayor Mario Venegas, no constituye un castigo, y que "de ninguna forma podemos nosotros castigar a un mayor con unos carabineros que fueron emboscados, que fueron atacados y que se replegaron y no obstante replegarse fueron seguidos por un grupo de violentistas".
Explicó el jefe policial que la reasignación del oficial obedece a la seguridad tanto del funcionario como de su familia, y para evitar que algún "desalmado" pretenda atentar contra él o los suyos.
En segundo lugar, precisó Cienfuegos, la medida obedece también a una mejor investigación interna de la institución ante el hecho que derivó en la muerte del comunero mapuche de 17 años, Edmundo Lemún.
El comisario en cuestión fue reasignado a labores administrativas en la ciudad de Temuco y en su lugar se designó temporalmente al capitán Rodrigo Medina.
Lemún, de la comuninad Requem Lemún (comuna de Ercilla IX Región), murió el 12 de Noviembre al recibir una bala mientras participaba en una movilización mapuche en el Fundo Santa Elisa de propiedad de la forestal Mininco, en las proximidades de Angol.