SANTIAGO.- En estado grave permanece Ángel Torres Lara, de 12 años, quien resultó herido ayer tras explotar una granada con la que jugaba junto a un amigo.
El menor, internado en la Unidad de Tratamiento Intensivo (UTI) del Hospital Padre Hurtado, está conectado a un respirador artificial, pues sufrió una contusión pulmonar, además de la pérdida de su mano izquierda.
El otro niño lesionado, Daniel Arzola, de 10 años, está internado en el Hospital Sótero del Río, en estado de mediana gravedad, pero fuera de peligro de muerte.