María Huerta, vocera de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES).
Héctor Aravena / El MercurioSANTIAGO.- María Huerta, vocera de los estudiantes secundarios, está completamente segura de que los desalojos en varios liceos emblemáticos realizados por Carabineros tendrán una sola consecuencia: la radicalización del movimiento.
"Formalmente invitada a estar retenida en la Primera Comisaría", tras el desalojo al Instituto Nacional realizado esta mañana, la representante de la Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (ACES) conversó con EMOL y advirtió que "esto lo único que provoca es que los alumnos no se tomen los colegios pero sí salgan a las calles. Y en las calles las cosas se complican".
Al ser consultada si esto implica una radicalización su respuesta es fuerte y clara: "absolutamente". Y explica que el estar en toma "era una forma totalmente pacífica de presionar. Ahora vas a tener a los alumnos sin clases, afuera de los liceos, haciendo destrozos y dejando la cagá. Entonces si ellos tomaron la decisión, ¡que asuman que los secundarios no van a estar tan tranquilitos!".
Respecto del ultimátum que dieron al Gobierno el sábado recién pasado, la dirigente no duda que después de los desalojos éste "sigue más firme que nunca".
La idea, dice, está en barajar las distintas alternativas. "Algunos plantean bajarse del consejo asesor, algunos quieren inventar una forma nueva de movilizarnos y otros plantean no ir más a clases… está entretenida la cosa", dice Huerta desde la Primera Comisaría.
Irregularidades en desalojos
Insistiendo en que no entiende cuál es la justificación para expulsar a un joven de un establecimiento, "cuando los alumnos no andan alcoholizados ni drogados, y se hacen jornadas recreativas y culturales", la vocera explica que tras las drásticas sanciones que se impusieron a los alumnos del Liceo Lastarria se han contactado con abogados para establecer los pasos a seguir.
"Según ellos nos dicen, no hay ninguna ley que avale las querellas que se quieren interponer contra los jóvenes", argumenta.
Y a pesar de que subraya que hasta ahora todos los desalojos han sido pacíficos, advierte que se han registrado situaciones irregulares. La más preocupante -a su juicio- es que los carabineros jamás les han mostrado quién autoriza las acciones.
"Los alumnos nunca se han enterado de quién fue el que autorizó el desalojo. Tenemos entendido que el alcalde o el director son los únicos que lo pueden hacer, pero nunca sabemos quién es el que autoriza", concluye.