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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 08:30
SANTIAGO.- Pasadas las seis de la mañana terminó la reunión entre los dirigentes del sindicado de choferes de Alsacia y los empresarios sin que llegaran a un acuerdo para terminar con la huelga que llevan adelante los conductores del troncal 1 desde la madrugada de hoy miércoles.
De acuerdo a las primeras informaciones, la frecuencia de los buses troncales administrados por esta empresa es normal en las diversas comunas en las que operan. En un recorrido por Santiago, se ha visto un flujo normal de movilización de Alsacia en Providencia, Macul, Las Rejas y Ñuñoa, así como también en Maipú, donde opera Express, cuyos trabajadores se sumaron al paro en muestra de apoyo.
Así lo confirmó el subsecretario de Transportes, Danilo Núñez, quien afirmó en contacto con radio BíoBío que el sistema funciona casi con normalidad.
No obstante, dirigentes de los choferes aseguraron a la misma radio que durante las próximas horas la situación empeorará, por lo que la frecuencia de los troncales disminuirá y los usuarios tendrán más dificultades para desplazarse en la capital.
Antecedentes entregados por la empresa Alsacia aseguran que hasta las siete de la mañana registraban 300 buses en las calles. Actualmente la compañía dispone de 617 buses Volvo, año 2005, entre articulados de 18,5 metros y máquinas de 12 metros.
Daños y detenidos
De acuerdo a lo informado esta mañana por la empresa Alsacia, hasta ahora se registra un saldo de 45 buses daños, principalmente por apedreamientos registrados en General Velásquez.
Producto de ello, según especificó la empresa, hay ocho operadores lesionados y un usuario herido. Asimismo, los intentos de los trabajadores movilizados por impedir la salida de buses dejan un saldo de ocho detenidos por Carabineros.
La movilización involucra a 478 trabajadores de un sindicato y según estimaciones de los propios conductores la falta de servicios en los troncales 1 y 4 podría afectar a 1,5 millones de personas de 13 comunas de Santiago, como Pudahuel, Estación Central, Santiago, Providencia, Las Condes y San Joaquín, entre otras.
La reunión, que se realizó en el Terminal Cerrillos, buscaba lograr un acuerdo para que depusieran la huelga y no bloquearan los terminales, evitando así la salida de buses.
Los representantes de Alsacia y Express solicitaron al Gobierno medidas de seguridad para garantizar la salida de buses desde los terminales, así como para evitar ataques en los recorridos.
Esta huelga se registra pocas horas después de que el Senado aprobara la idea de legislar sobre una inyección de 290 millones de dólares al plan de transporte, para evitar su colapso en lo que resta de 2007, principalmente por la cantidad de personas que usa el sistema sin pagar la tarifa.
