LA HABANA.- El juez Juan Guzmán, que abrió el primer proceso en Chile contra Augusto Pinochet, afirmó que cinco cubanos presos en Estados Unidos desde 1998 bajo cargos de espionaje deben ser liberados, porque el juicio realizado en Miami no fue imparcial ni objetivo.
Guzmán expresó su opinión a los medios cubanos vía telefónica tras asistir el lunes a la última apelación en una corte de Atlanta, ante la que la defensa pidió la liberación o reducción de las penas impuestas en el juicio en 2001, que van de los 15 años a la prisión perpetua.
"Después de esta audiencia, deben dictar la sentencia para que estos jóvenes salgan inmediatamente de la cárcel. Creo que esos jueces deben dormir bien por el resto de sus días, y si quieren dormir con la conciencia tranquila deben exculparlos, liberar a los cinco cubanos", subrayó.
En declaraciones al programa de televisión Mesa Redonda Informativa, reproducidas este martes por el diario oficial Granma, Guzmán estimó: "Quedó claro que Miami no era el lugar adecuado para el juicio, porque los jurados estaban muy presionados y hasta asustados".
"No había ni imparcialidad ni objetividad por parte del jurado", predispuesto por presiones de la fiscalía para condenar a los cinco cubanos, dijo Guzmán, primer magistrado chileno que puso bajo arresto entre febrero y marzo de 2001 al fallecido ex general Pinochet.
En la tercera y última apelación en el caso, la defensa insistió en la falta de evidencias en el proceso contra Gerardo Hernández, René González, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Fernando González. Tres fueron condenados a cadena perpetua, uno a 19 años de prisión y otro a 15.
Los cinco fueron detenidos en 1998 y Cuba admitió que eran sus agentes, pero no para espiar a Estados Unidos, sino a los grupos anticastristas que realizan acciones contra la isla.
El 9 de agosto de 2005, un panel de jueces decidió la realización de un nuevo juicio, por considerar que el de Miami, capital del exilio cubano, no tuvo una sede imparcial debido a fuertes presiones anticastristas.
Exactamente un año después, fue revocada la decisión al determinar que nada indicaba que hubiese sido imposible reunir un jurado imparcial en Miami.
La Habana los considera "luchadores contra en terrorismo" y el Parlamento cubano les confirió el status de "Héroes de la Patria", y ha desplegado una extensa campaña internacional para su liberación, encabezada por el ahora convaleciente presidente Fidel Castro.