Lagos: "Yo no quiero lavarme las manos por el diseño del Transantiago"

SANTIAGO.- Luego de la polémica que causó la carta que envió a la comisión investigadora del Transantiago, el ex Presidente Ricardo Lagos se defendió de las críticas que ha recibido frente a este tema e insistió en que él asume la responsabilidad de poner en ejecución un plan cuyo propósito es modificar sustancialmente la forma de transportarse de los santiaguinos.

"Yo no quiero aquí lavarme las manos por el diseño del plan, ahora otra cosa es que tampoco puedo hacerme responsable de lo que ocurre después de mi periodo" y puntualizó que no le corresponde juzgar còmo se ha implementado el plan "porque no estoy gobenando".

Además, el ex Mandatario agregó que le hubiese gustado participar en la instancia que buscar determinar las responsabilidades de los errores del Transantiago, lo que no concretó debido al ambiente que rodeaba a la instancia.

"Me habría gustado mucho poder asistir a la comisión, pero la opinión pública conoce lo que la comisión ha hecho, las visitas que he recibido, los insultos que se me han dado", señaló el ex Mandatario en conversación con Radio Cooperativa, haciendo hincapié en que la actitud de los parlamentarios del bloque opositores fue un importante escollo para su participación en la instancia.

En esa línea, Lagos dijo que a su juicio "la oposición está cometiendo un grave error" y la llamó a "cuidar las palabras", porque "en democracia tenemos que ser capaces de tener una relación cívica adecuada y en último término no se está insultado a Ricardo Lagos, se está insultando a alguien que desempeñó la Presidencia de la República y eso le hace mal a Chile".

Según indicó, le pareció que "era inadecuado asistir a un Parlamento que estaba integrado por personas que se habían ido a instalar con pancartas en mi oficina, a sabiendas que yo no estaba en Chile".

Con este argumentó descartó que hubiese temido a las consecuencias de una citación de la Cámara de Diputados y recordó que "el país sabe que yo levanté la voz, cuando todos callaban, cuando muchos no decían las cosas que ocurrían, no ha sido el miedo lo que ha caracterizado mi actuación en la vida pública."

Lagos recalcó además que su silencio no se debió a un intento por evadir sus responsabilidades, sino que a un actitud de respeto por las actuales autoridades y agregó que su decisión  "ha tenido un alto costo y estoy consciente de eso".

Desde de su departamento en calle Vera y Pintado en Providencia, el ex gobernante aclaró que "cada autoridad asume su responsabilidad por las decisiones que toma. La responsabilidad de implementar esto de una forma u otra, lo están haciendo hoy las actuales autoridades y mi obligación es ayudarlas".

Asimismo, el ex gobernante destacó que lo importante es que se ha mantenido el grueso del diseño esbozado durante su mandato en cuando a los ejes centrales del plan, como la existencia de los buses troncales, los alimentadores y la tarjeta BIP.

Los culpables

Tras destacar los esfuerzos del ministro René Cortázar para lograr que el Transantiago se parezca lo más posible al Metro, Lagos recalcó que gran parte de los problemas del sistema de transporte radican en el incumplimiento del Administrador Financiero con respecto al plan.

En ese sentido, explicó que una de las grandes falencias del sistema es la inexistencia de un programa de control de flota que permita saber exactamente cuántos buses hay en las calles y dónde están exactamente, lo que calificó como un "requisito fundamental para que el Transantiago funcionara como el diseño lo indicaba. Ése era el corazón del plan".

Frente a esta falla, Lagos responsabilizó a la empresa a cargo del software de control de flota, Sonda y a "los cuatro bancos más importantes de Chile más una multitienda" que la contrataron, por no asumir que pasado 10  meses no han sido capaces de cumplir con lo estipulado en los contratos y enfatizó que "sin este elemento es difícil que pueda funcionar el Transantiago como está diseñado".

Sobre ese mismo punto, el ex Presidente Lahgos descartó que los contratos hayan muy sido favorables a los privados y aclaró que le parece "normal" que estos deban se modificados "porque eso tiene que ver con el dinamismo de una situación. Santiago está creciendo".