SANTIAGO.- El abogado Alfredo Morgado, representante de la docente Sandra Pavez, asegura que llevarán el caso hasta la Corte Interamericana de Derechos Humanos si es necesario, argumentando que se le negó un certificado de idoneidad para ejercer como profesora de religión debido a su lesbianismo
Ello, después de presentar los próximos días un recurso ante la Corte Suprema chilena, buscando que revierta el fallo en que ayer el tribunal de alzada de San Miguel declaró inadmisible un recurso de protección presnetado por Sandra Pavez, profesora del colegio municipal de San Bernardo.
El profesional subraya en conversación con Emol que se le canceló el certificado de idoneidad a la profesora "exclusivamente por su orientación sexual". El abogado afirma que toda la comunidad escolar respalda a su clienta y que lleva 25 años ejerciendo la profesión.
"Obtuvo su título en la Pontificia Universidad Católica de Chile, lleva más de 20 años ejerciendo en el mismo colegio, es el colegio municipal de San Bernardo, con impecables conductas y con el apoyo de los docentes, vale decir sus pares, el cuerpo directivo, la municipalidad, el departamento de educación, los alumnos, y los apoderados", asegura.
Advierte además que ese apoyo se mantuvo después de que la orientación sexual de la maestra se conociera públicamente, debido a la continuas consultas que le hizo la Vicaría de Educación de San Bernardo.
"El obispado de San Bernardo citó a la profesora y le requirió y le consultó si era cierto el rumor que había llegado a ellos de su orientación sexual, y ella les contestó que eso estaba dentro de su vida privada, que nadie podía consultarle por lo que es su vida privada y que no tenía ninguna relación con el ejercicio de su profesión, de profesora de religión, sin perjuicio de lo cual, ante la instistencia de la consulta dijo 'sí, yo tengo una orientación sexual determinada'", comenta el abogado de la docente.
Agrega que, acto seguido, le recomendaron realizar un retiro espiritual y someterse a un tratamiendo siquiátrico para '"mejorarse", a lo que ella contestó que durante toda su vida había concurrido a consultas siquiátricas y sicológicas y que la conclusión de todos los especialistas era que debía asumir su orientación.
Todo ello, a juicio de Morgado representa "una intromisión indebida en lo que es sus derechos inalienables y su dignidad", por ello seguirán apelando a que la justicia revierta la decisión que tiene a la profesora impedida de trabajar.