Alberto Espina califica como un acto "terrorista" el ataque a predio de Vilcún

SANTIAGO.- Satisfechos se retiraron los senadores de Renovación Nacional Alberto Espina y José García Ruminot, tras sostener una reunión en el Palacio de La Moneda con el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma, y el subsecretario de la cartera, Felipe Harboe, para analizar el atentado incendiario que sufrió ayer un predio del agricultor Eduardo Luchsinger, en Vilcún, Región de La Araucanía.

A su salida, ambos parlamentarios aseguraron que tomaron conocimiento de las acciones que llevará a cabo la Secretaría de Estado con el objeto de dar con los responsables del hecho, el que para Espina fue un acto "terrorista" y no un ataque de "personas vinculadas al movimiento mapuche".

De igual modo, el parlamentario arguyó que hechos de violencia como el ocurrido el domingo trascienden los aspectos políticos entre el Gobierno y la oposición, ya que son parte del trabajo en conjunto que deben hacer ambos para combatirlos.

Por su parte, el agricultor Eduardo Luchsinger, dueño del fundo Santa Rosa, durante la tarde aseguró tener confianza en la querella interpuesta por el Ejecutivo para investigar los hechos y que determinen el paradero de los 12 encapuchados.

"Espero que esto siga su curso pero más rápido que tarde, porque hasta el momento se ha visto que las cosas se resuelven cuando ha pasado demasiada agua bajo el puente", dijo.

Ante esto, horas antes, el subsecretario del Interior, Felipe Harboe, dijo que no se podía responsabilizar el hecho a ningún grupo en particular, pese a que la Coordinadora Arauco Malleco se habría atribuido a través de un e-mail el atentado.

"Nosotros no podemos imputar responsabilidad a ningún grupo por el minuto, más allá del comunicado que se adjudica este atentado, razón por la cual creemos que lo que corresponde en estas materias es perseguir la responsabilidad criminal, hasta las últimas consecuencias", sostuvo.