SANTIAGO.- Asumiendo que es "un proceso que puede extenderse" por días, el esposo del primer caso grave por influenza humana en el país, Gladys Azócar Poblete (38), mantiene las esperanzas de que su mujer se recuperará, por lo que no pierde la fe de una recuperación.
"Le pido a Dios que ojalá salga la Gladys; que tire para arriba. Estamos todos en la familia esperando que llegue eso", dice José Luis Espinoza, quien relató a Telenoche cómo le fue detectada la gripe A (H1N1) a la afectada.
"Me explicaron que había desarrollado una neumonía... que estaba muy grave y que se estaba haciendo todo lo posible para poder sacarla del estado en el que estaba (...). Luego me citaron a la Posta (Central) y me explicaron que estaba ratificado que era portadora del virus", cuenta el marido de la oriunda de Chillán, quien permanece conectada a un ventilador mecánico en la Clínica Las Condes.
Pese al riesgo que implicaba un posible contagio con la paciente, Espinoza precisó que fue desechada la presencia de la enfermedad tanto en él como en sus tres hijos.
"Ayer (el miércoles) nos realizaron exámenes para descartar que no estábamos emitiendo bichos (Sic) todavía y (los resultados) ya lo descartaron", detalla.
El hombre señala que su esposa no ha presentado mejorías en su estado de salud, aunque "está pasando una noche estable".
"No ha mejorado de la neumonía, de su problema de los pulmones, pero hay que tener fe", agrega Espinoza, al tiempo que apunta que la dieta a la cual se sometió Gladys "ya la había hecho antes y no había tenido problemas".