SANTIAGO.- Un nuevo capítulo en la polémica desatada por la orden de arresto que pesó sobre Sebastián Piñera en 1982 se escribió hoy, luego de que los presidentes de los partidos de la Concertación pusieran en duda el origen de la fortuna del candidato presidencial de la oposición.
Con la orden de captura en mano, el vocero del conglomerado, Camilo Escalona, señaló que la investigación en torno al Banco de Talca alcanzaba los 240 millones de dólares, "una cifra suficiente como para alimentar las sospechas de que la fortuna del señor Piñera algún vínculo tiene con este proceso".
"Tenemos una opinión en relación al origen de las fortunas de personas y ex funcionarios de la dictadura que no tenían fortunas, y cuando el régimen militar terminó sí tenían una enorme fortuna (…) Hemos seguido estos hechos de las privatizaciones oscuras que hubo durante el régimen militar", añadió.
El jefe partidista emplazó al candidato de la Coalición por el Cambio a entregar una explicación concreta sobre los hechos ocurridos mientras era ejecutivo del banco, los que se hicieron públicos hace pocos días tras las declaraciones de la ex ministra de Justicia, Mónica Madariaga, quien aseguró que había hecho gestiones para evitar el encarcelamiento de Piñera.
A juicio de Escalona, este es un tema de Estado, por lo que valoró la intervención del secretario general de Gobierno (s) Neftalí Carabantes, respecto a la necesidad de que el empresario aclare la verdad de los hechos.
"Todos los temas de Estado son obligación de un Gobierno. Es un tema de Estado porque está involucrado un patrimonio público cuantioso", declaró.
El senador añadió que desde el punto de vista de la ética, los partidos políticos de la Concertación consideran que este caso "invalida" la candidatura presidencial de Piñera.
"Estos son los hechos que Sebastián Piñera no ha sido capaz de aclarar y que nosotros exigimos, no por nosotros, sino que por el país, por la opinión pública, por la investidura a la que aspira, a que lo haga", manifestó.
Y marcó la diferencia con el caso del ex ministro de Salud del gobierno de Eduardo Frei, Carlos Massad, argumentando que Piñera "es una persona que aspira a dirigir el país", mientras las responsabilidades del señor Massad le corresponde asumirlas a él, en el caso que las tenga".