El esmog es en lo primero que piensa uno de cada tres habitantes cuando se le pregunta por Santiago.
Karen Cravero, El MercurioSANTIAGO.- Esmog. Esa es la primera palabra que se le viene a la cabeza a uno de cada tres habitantes de regiones cuando se les pide que piensen en Santiago.
No deja de ser sintomático que se trate de un vocablo derivado del inglés y que se vincula directamente con las tradicionalmente negativas condiciones de calidad del aire que afectan a la capital durante el invierno. Signo de que, al cumplir su aniversario número 470, Santiago es visto por el resto del país como una ciudad que es tan cosmopolita como inhóspita, según una encuesta aplicada por "El Mercurio" y Opina S.A. en las regiones de Antofagasta, Valparaíso, Biobío y Metropolitana.
En regiones, los adjetivos preferidos para definir a la ciudad que fundó Pedro de Valdivia el 12 de febrero de 1541 son "contaminada" y "ruidosa", evaluación en la que coinciden con la imagen que tienen los propios capitalinos.
Donde las opiniones se separan es ante los calificativos "caótica" y "peligrosa", donde la imagen que tienen de la ciudad fuera de ella es bastante más pesimista que la de sus habitantes. Lo que no significa que siempre la imagen de la ciudad sea peor afuera que dentro. De hecho, en regiones consideran bastante más "cosmopolita" a Santiago que los santiaguinos.
A propósito de los santiaguinos, su imagen ante el resto del país parece bastante devaluada: son pocos los que los consideran "amistosos" y "acogedores" y apenas 7,9% los considera "cultos". Eso sí, desde fuera se ven menos "trabajólicos" y "desconfiados" que lo que ellos mismos creen.
En lo que también hay miradas diferentes es respecto de los principales problemas que aquejan a la capital. En regiones opinan que la contaminación y la delincuencia son los principales flagelos, pero para los santiaguinos la congestión vehicular es peor que la inseguridad.
Pero dejando fuera lo malo, ¿qué es lo que más "envidian" de la capital en el resto del país? La respuesta es clara: la variedad de servicios, espectáculos y actividades culturales y el aeropuerto. Curiosamente, los santiaguinos se sienten más orgullosos de sus universidades y del Metro que de otras cosas. Un resultado llamativo es que lo que menos valoran en el resto del país son las autopistas urbanas de la capital, obras que en sí tienen mucha importancia para los capitalinos.
54,3%
de los habitantes de regiones opina que en Santiago la calidad de vida es peor. Capitalinos perciben al resto de los chilenos como acogedores, relajados, tranquilos y sanos
El 44,2% de los santiaguinos cree que fuera de la capital se vive mejor, versus un 23,9% que prefiere la capital y un 20,6% que no ve mayor diferencia.
La opinión de la mayoría puede estar influenciada por la belleza de los paisajes de las demás regiones del país, así como también por la positiva impresión que tienen de los habitantes de ellas.
Nueve de cada diez capitalinos considera a los demás chilenos como acogedores. Una percepción radicalmente inversa a la imagen que tienen de sí mismos, ya que sólo tres de cada diez santiaguinos siente la presencia de ese atributo entre sus pares. Esta impresión se condice con el hecho de ver a los habitantes de provincias como solidarios y familiares.
En general, la opinión de los santiaguinos tiende a coincidir con la imagen que tienen de sí mismos en el resto del país.
Aun así, existen tres desacuerdos evidentes. El más claro está en torno al carácter presuntamente "relajado" y "tranquilo" de los habitantes de regiones. En la capital dicha imagen está más extendida que entre los aludidos.
El segundo es que un mayoritario 51,2% de los capitalinos considera que el adjetivo "pueblerino" representa al resto del país. El resto del país, por su parte, disiente fuertemente de dicha apreciación.
El último desacuerdo es que 18,7% de los habitantes de Santiago ve a los de regiones como "poco calificados", evaluación que fuera de la Región Metropolitana baja a sólo 11,3%.