Los senadores expresaron en forma conjunta su postura ante la decisión del Mandatario boliviano.
Archivo El MercurioVALPARAISO.- Fuerte molestia causó en el Senado la decisión del Presidente de Bolivia, Evo Morales, de acudir a la justicia internacional para lograr que Chile le otorgue un acceso soberano al mar.
Los primeros en manifestar su rechazo a la actitud del gobernante altiplánico fueron Jorge Pizarro (DC) y Hernán Larraín (UDI), miembros de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta, a quienes llamó la atención "la contradicción absoluta" entre lo expresado por Morales a "El Mercurio" y el anuncio que hizo esta mañana en el marco del 132° aniversario del Día del Mar.
"Las palabras que ha pronunciado hoy día el Presidente Evo Morales vuelven a generar mucha desconfianza y rompen ese clima que se ha estado trabajando", sentenció el ex presidente de la UDI, aludiendo a la agenda de trece puntos que ambos países han discutido desde el año 2006, con miras a lograr acuerdos a través del diálogo.
Al respecto, el senador Pizarro dijo que resulta "muy difícil" mantener esa agenda si al mismo tiempo se amenaza con judicializar el tema marítimo.
Por esta razón, ambos parlamentarios plantearon que el gobierno de Bolivia debe "salir de esa ambigüedad" y definir si continúa por la senda de las reuniones bilaterales o lleva el caso a los tribunales internacionales, motivado por las "presiones internas".
"Si la única voluntad es judicializar estos temas, aparte de que constituye un desaire al esfuerzo que ha hecho Chile, es también un error judicial monumental porque no hay pie para una cosa de esa naturaleza ", advirtió Larraín, para quien "Chile no tiene deudas pendientes con Bolivia", ya que los tratados vigentes desde 1904 "resuelven íntegramente nuestra situación fronteriza".
"Lo que va a ocurrir, al final del día, es que todos los esfuerzos por integrar se van a volver a perder. Es muy difícil construir confianzas, en cambio es muy fácil destruirlas", añadió.
A juicio de Larraín y Pizarro, la solución para este asunto requiere una "generosidad y voluntad" de parte de los gobiernos de ambos países, que con actitudes como la de Morales "se empieza a distanciar o resquebrajar".
Por tal motivo, solicitaron al Mandatario altiplánico que "subsane rápidamente" este "error" que daña a los dos pueblos y retome el acuerdo como el único camino posible para hallar una solución a la demanda marítima.
"Nos parece necesario insistir en el diálogo que están llevando adelante nuestras Cancillerías, en el diálogo político que permita encontrar alguna fórmula imaginativa, que concilie el interés boliviano de tener acceso al mar y que, a su vez, deje claramente establecido que desde el punto de vista de Chile no significa ningún aspecto de cesión de soberanía ni mucho menos", resumió el senador DC.
Pizarro:
"Hablamos de un gesto inamistoso, hablamos también de un error y hablamos de una actitud unilateral que no se condice con el nivel de relaciones que teníamos con Perú y que hemos mantenido hasta ahora. Y así ha significado retrocesos, avances en la relación con Perú y ciertas desconfianzas que no es bueno tenerlas. Ojalá con Bolivia no nos ocurra lo mismo, pero como este tema se ha planteado en distintas oportunidades por el Presidente Morales y por otros presidentes".
"Nosotros con el senador Larraín tenemos todavía el optimismo de pensar que el Presidente Morales va a corregir una vez más sus dichos, aunque se contradiga nuevamente".
"Llama la atención la contradicción absoluta entre lo planteado al diario El Mercurio el día de hoy (...) y el que hoy día insisita y plantee acudir a organismos internacionales.
"Nos parece que es una incoherencia que además tiene poco sentido práctico, porque este es claramente un tema bilateral, el derecho internacional clramente establece la vigencia de los tratados de 1904, que se han aplicado a cabalidad, que no van a tener ningún destino plaantyeamientos de esa naturaleza".
"Lo que nos parece necesario es insistir en el diálogo que están llevando adelante nuestras Cancillerías, en el diálogo político que permita encontrar alguna fórmula iamginativa, que concilie el interés boliviano de tener acceso al mar y que a su vez deje claramente establecido que desde el punto de vista de Chile no significa ningún aspecto de cesión de soberanía ni mucho menos".
"Y eso requiere generosidad y de voluntad que lamentablemente se empieza a distanciar o resquebrajar cuando se hacen planteamientos como el que ha hecho el Presidente Morales hoy día".
"Me parece que es un error, que esperamos pueda subsanar rápidamente el propio gobierno boliviano".
"Sabemos que esto es lamentablemente producto de las presiones internas en Bolivia, que con mucha facilidad ejercen influencias que no son buenas en materia de política exterior".
Hernán Larraín:
"Chile y Bolivia desde hace cinco años han estado construyendo confianzas para buscar un acuerdo que permita la mejor integración entre ambos países, y ha sido un esfuerzo muy serio, en donde el gobierno de Evo Morales y por Chile, tanto el gobierno de la Presidenta Bachelet como del Presidente Piñera, han exhibido una voluntad real, sincera y efectiva de acercar posiciones".
"Las palabras que ha pronunciado hoy día el Presidente Evo Morales vuelven a generar mucha desconfianza y rompen ese clima que se ha estado trabajando".
"Creo que Bolivia debe salir de esa ambigüedad, en que un día se sienta a conversar y ve cuánto podemos avanzar dentro de lo posible, para el día siguiente, por presiones internas o por los motivos que sean, contradecir esa postura y exigir una solución que si no se da en los términos que se quiere, se va y se amenaza con ir a los tribunales de justicia en el ámbito internacional".
"Hay que elegir un camino: o conversamos, construimos confianza y llegamos a acuerdo, o seguimos el camino que desgraciadamente ha abundado mucho desde 1904 en adelante, donde una y otra vez algún gobierno boliviano vuelve a plantear los temas en formas que son simplemente imposibles de concordar".
"Creo que las palabras de Evo Morales no ayudan ahora en nada a resolver una inquietud que es boliviana. Chile no tiene deudas pendientes con Bolivia, los tratados resuelven íntegramente nuestra situación fronteriza y por lo tanto todo lo que se pueda hacer supone la voluntad de los gobiernos, pero la voluntad es en un ánimo de confianza que hoy día Bolivia ha vuelto a rebajar y debilitar".
"Espero que Bolivia tome de una vez por todas una decisión, que es la de buscar la que ocurre en todos los países del mundo. Si la Unión Europea la construyeron Francia y Alemania, que no tenían una situación cómoda (...), ¿por qué Chile y Bolivia, y toda América Latina no pueden hacer ese esfuerzo? Esto es una cuestión de voluntad. Si no hay voluntad para construir acuerdos no vamos a llegar a ninguna parte. Vamos a perder todo".
"Si la única voluntad es judicializar estos temas, aparte de que constituye un desaire al esfuerzo que ha hecho Chile, es también un error judicial monumental porque no hay pie para una cosa de esa naturaleza. Lo que va a ocurrir al final del día es que todos los esfuerzos por integrar se van a volver a perder".
"Es muy difícil construir confianzas, en cambio es muy fácil destruirlas. Por eso consideramos un error lo que ha hehco el Presidente Evo Morales y esperamos que de una vez por todas se termune esta ambigüedad y nos juguemos por construir una solución entre ambos países, que con el tiempo pueda consolidar la hermandad con que los pueblso de Chile y Bolivia sueñan resolver sus antiguas querellas, porque lo que nos une ahora más que nunca es el futuro. No sigamos en un pasado que nos divide".
-Se puede mantener diálogo con Chile?
"Es muy difícil tener una agenda donde se conversa con mucha confianza y apertura trece temas (...), si al mismo tiempo se está amenazando con judicializar las causas principales que motivan a Bolivia en este diálogo con Chile. Por eso es que hay que entrar en un camino: o se entra en el plano de la conversación, del acuerdo fundado en la confianza para construir soluciones en todos los planos o simplemente se va a deshacer ese camino y vamos a entrar en la vorágine del desacuerdo, del conflicto judicial, que a la larga no solamentye no va tener resultados, sino que vamos a tener postergadop un diálogo por el bienestar de los pueblos".
Esto causa un daño a los pueblos y por eso espera que Evo vuelva atrás en sus dichos y q retoem el acuerdo como único camino posible, porque la vía judicial no conduce a nada y posterga el progreso de los pueblos.
Pizarro:
"Vamos a insistir e