La sede de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la Haya se ubica en Holanda.
LA HAYA.- Tal como estaba programado, esta mañana Chile presentó la dúplica ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de la Haya, en Holanda, para acreditar que los acuerdos de 1952 y 1954 son de carácter limítrofe y no pesqueros como considera Perú.
Los encargados en entregar los documentos fueron los agentes Alberto Van Klaveren y María Teresa Infante, junto al embajador chileno ante La Haya, Juan Martabit.
"Hemos aportado antecedentes nuevos", aseguró van Klaveren, tras presentar los 75 ejemplares con cerca de 300 páginas cada uno y cuatro anexos.
Éste último si bien no reveló en detalle el contenido de la documentación aportada por tratarse de material privado, sí adelantó que los nuevos elementos van dirigidos a probar el vínculo existente entre la práctica y los tratados que establecieron los límites marítimos entre Chile y Perú en 1952 y 1954.
"Creemos que hay un principio básico que es el respeto a los tratados internacionales. Tenemos tratados que nos vinculan con Perú y también con Ecuador sobre nuestra delimitación marítima", aseguró Van Klaveren, quien recalcó la importancia de mantener la estabilidad de las fronteras.
Desde la demanda de Perú en 2008, ambos países han contado con dos oportunidades para exponer sus argumentos: Perú, en marzo de 2009 y en noviembre de 2010; y Chile en marzo de 2010 y este lunes.
A su vez, Van Klaveren rehusó comentar las implicaciones para el proceso del cambio de Gobierno en Perú -el Presidente electo, Ollanta Humala, asumirá el cargo el próximo 28 de julio en sustitución de Alan García- y se limitó a decir que Chile mantiene una política de Estado consensuada con representantes de las más diversas posiciones políticas.
Una vez concluida esta última fase escrita, dará comienzo el proceso oral, en principio previsto para enero de 2012, pero que posiblemente acabará retrasándose.
"Es difícil decir todavía cuándo va a ser, porque la Corte tiene una carga de trabajo muy importante", explicó van Klaveren, y recordó que además el Tribunal renovará a un tercio de sus jueces y volver a constituirse a partir del mes de febrero del próximo año.
Los contenciosos ante la CIJ, máximo órgano judicial de la ONU, pueden llegar a prolongarse durante varios años y, según su reglamento interno, los documentos presentados durante la fase escrita tienen carácter confidencial hasta que empiezan las audiencias orales.