Juan Carlos Cruz, denunciante en el caso Karadima.
Cristián Carvallo, El Mercurio
SANTIAGO.- Juan Carlos Cruz, uno de los denunciantes de abusos en el caso Karadima, planteó duras críticas a la jerarquía de la Iglesia Católica chilena por no adoptar a tiempo, según opinó, medidas decisivas para evitar situaciones como las que vivió en la parroquia del Sagrado Corazón de El Bosque.
Así reacciónó luego de que el Arzobispado de Santiago comunicó que
se puso término a la Unión Sacerdotal que presidía el sancionado sacerdote.
"Llega un momento en el que uno dice 'hasta cuándo'", manifestó Cruz. "Sólo reaccionan ante los abusos cuando la gente comienza a gritar".
El denunciante consideró que las autoridades de la Iglesia Católica y, específicamente, la Conferencia Episcopal y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, han actuado con lentitud al tomar pedidas para prevenir y sancionar abusos.
"Nadie toma cambios radicales, y lo digo como católico practicante y observante, queriendo a la Iglesia. No recurren a otros hombres y mujeres, que hay tantos buenos en la Iglesia, para que tomen las riendas", aseveró.
Murillo: "Medida necesaria, pero no suficiente"
José Andrés Murillo, otro de los denunciantes en el caso, consideró que la medida adoptada por la Iglesia de Santiago "era necesaria, pero no me parece suficiente".
"Puede ser incluso una forma de eclipsar las cosas que realmente hay que hacer, que es buscar responsabilidades y determinar quiénes han continuado con este modo de operar (de Karadima), que es abusivo", agregó.
Esta tarde, el Arzobispado confirmó que se puso término canónicamente a la Unión Sacerdotal del Sagrado Corazón de Jesús que lideraba Fernando Karadima.
Según denuncias de personas que participaron en ella, dicha organización amparaba actividades económicas que han sido cuestionadas, las cuales quedaron al descubierto paralelamente a la investigación de los abusos sexuales de los que se responsabiliza al sacerdote.