De acuerdo a la última encuesta realizada por Paz Ciudadana y Adimark, que fue dada a conocer esta mañana, el porcentaje de hogares víctimas de robo en los últimos seis meses se mantuvo en un 39,3%, no detectándose diferencias significativas entre Santiago y regiones, ni tampoco según niveles socioeconómicos.
El sondeo –que también mide los niveles de temor, denuncias, evaluación de autoridades en materia de seguridad y desempeño policial- arrojó además que 72,5% de los delitos ocurren fuera de la comuna de residencia, en espacios públicos y sin violencia.
Respecto a la revictimización, el índice muestra que durante el primer semestre de 2012, el 27% de los hogares chilenos concentran el 90,6% de los delitos, destacando que en el área nororiente de Santiago disminuyó la cifra de hogares revictimizados de 71,1% a 61,8%.
Sin embargo, los delitos de robo en la capital siguen focalizándose en el sector surponiente, alcanzando un 78,5% versus un 72,5% registrado en diciembre de 2011.
La encuesta también afirma que el porcentaje de los delitos denunciados es similar a la medición del semestre anterior –cercano al 60%-, lo que implica que se siguen denunciando 6 de cada 10 delitos de robo.
Sobre la percepción de temor de los chilenos, se percibió una baja de un 14,2% a un 11,7%, siendo los segmentos de menores ingresos donde el temor “alto” es mayor, con un 20,3%
Respecto a las policías, el porcentaje de víctimas que denuncian y que se declaran satisfechas se registró un leve aumento de 43,1% en diciembre de 2011 a 45,6% en julio 2012.
Tras conocer los resultados, el subsecretario de Prevención del Delito, Cristóbal Lira, señaló que las conclusiones son alentadoras y que demuestran que el trabajo antidelincuencia que desarrolla el gobierno junto a las policías van por buen camino.
En tal sentido, el subsecretario Cristóbal Lira enfatizó que "se trata, sin duda, de una muy buena noticia, que va en línea con la baja en las denuncias que dio a conocer ayer Carabineros".
"No sólo estamos en presencia de un importante freno en la victimización, sino también de una baja considerable en la percepción de temor de la gente, que es finalmente lo que incide en la calidad de vida de los chilenos. Esto es una muestra de que los programas antidelincuencia están funcionando, pero más importante aún, que la gente lo está percibiendo", concluyó