SANTIAGO.- Un grupo de alrededor de 40 miembros del movimiento Andha Chile se tomó la sede de la UDI, ubicada en la calle Suecia N°286 en la comuna de Providencia, a eso de las 11:30 horas, para protestar en contra de la "indiferencia" del Gobierno ante sus demandas como deudores habitacionales.
En este minuto, personal de Carabineros se encuentra en el lugar para tratar de desalojar a los dirigentes, quienes a pesar de llegar a un acuerdo con los militantes del partido que se encontraban en ese minuto en la sede de realizar una toma pacífica, se han negado a dejar el lugar hasta enfrentarse con la policía.
Al momento del ingreso de los manifestantes, el único dirigente gremialista que se encontraba al interior del inmueble era el presidente de la Juventud de la UDI, Álvaro Pillado, quien explicó a Emol que hasta el momento todo se ha dado en un marco pacífico y que están esperando que algunos dirigentes desistan de forzar el desalojo.
"Ellos vinieron a manifestar inicialmente algunos planteamientos y diferencias con el Gobierno que nosotros respetamos, incluso conversando alcanzamos un acuerdo en cuanto a proceder con el diálogo y eso significó que ellos dijeron que apenas llegaran los medios de comunicación iban a expresar su punto de vista e iban a desalojar pacíficamente", explicó.
Pillado agregó que "lamentablemente, hay algunos dirigentes que no quieren cumplir ese acuerdo y que están buscando el desalojo. Ellos quieren ser desalojados y lamentablemente nosotros no podemos tomar otra medida".
"Nosotros encontramos que esa es una buena fórmula, porque también reconocemos que esta toma que en si mismo son actos de violencia, desde nuestro punto de vista, que nunca son legítimos para expresar las diferencias en una democracia. Se ha producido, sin embargo, de una forma mucho más tranquila que tomas anteriores", indicó.
Pillado agregó que "nosotros hemos querido que todo esto se produzca con la mayor normalidad, con la mayor calma posible, esa ha sido nuestra voluntad, pero hay algunos grupos de personas que pretenden que ese no sea el camino".
De esta forma, este incidente se transforma en la novena toma que sufre la sede del gremialismo en menos de un año.