"Va a haber una transición que va a ser difícil, pero hay que subirse a ese carro", afirmó el ministro.
El MercurioSANTIAGO.- El ministro de Educación, Harald Beyer, admitió que la transición hacia el nuevo sistema de acreditación, anunciado ayer por el Ejecutivo, será compleja, pero remarcó que lo importante es "asegurar la calidad" de la enseñanza que imparten las instituciones de educación superior.
"Lo que se está reclamando es que el actual sistema no asegura calidad y nosotros tenemos que avanzar hacia eso y va a haber una transición que va a ser difícil, pero hay que subirse a ese carro. Tenemos que asegurar que todas las instituciones cumplan con los estándares de calidad que el país requiere", afirmó el ministro en entrevista con Teletrece AM.
El proyecto del Ejecutivo establece, entre otros puntos, que la acreditación será obligatoria y que las instituciones que no la obtengan no podrán acceder a recursos públicos ni entregar títulos o grados, lo que en la práctica implicaría su cierre. También termina con la acreditación entre uno y siete años, como ahora, sino que será uniforme por seis años.
Beyer defendió estas medidas y sostuvo que en el actual sistema de acreditación, al permitir a las universidades que puedan acreditarse por incluso uno o dos años, "nunca hay realmente algo que la empuje a tener estándares de calidad".
"Lo que permite el diseño actual del sistema, que nosotros creemos incorrecto, es que una institución pueda irse por dos años en forma permanente y nunca sube sus estándares. Entonces esto (el nuevo proyecto) cambia los incentivos, porque la institución va a tener que subirse a estándares razonables que le permitan llegar a tener calidad", subrayó.
De todas formas, el ministro aclaró que las instituciones tendrán "un plazo para ponerse al día" y cumplir con los doce estándares que establece el nuevo sistema. En esa línea, detalló que el cambio no será de un día para otro, sino que las universidades se irán sometiendo a la nueva acreditación a medida que vayan venciendo sus acreditaciones y aquéllas que no están acreditadas van a tener un plazo de tres años para mejorar sus estándares.
En el caso de que una universidad no sea acreditada bajo el nuevo sistema, la autoridad aclaró que no se les cambiarán las condiciones a los estudiantes que entraron bajo las anteriores condiciones, sino que sólo a los nuevos alumnos.
Respecto de los miembros que tendrá la Agencia Nacional de Acreditación –que reemplazará a la Comisión Nacional de Acreditación– indicó sus inhabilidades serán "mucho mayores que las que tienen hoy día", pues no podrán ser consejeros y al mismo tiempo realizar consultorías a una universidad y su vínculo con las instituciones sólo se limitará a la investigación o la docencia.
U. del Mar seguiría funcionando hasta por 3 años tras cierre
El ministro Beyer insistió en que si el Consejo Nacional de Educación (CNED) decreta el cierre de la Universidad del Mar, el Ministerio de Educación se hará cargo de la institución durante ese proceso. "Vamos a velar porque los estudiantes se reubiquen, y los vamos a defender frente a otras instituciones, y a los estudiantes que se queden en la universidad nos vamos a asegurar de que terminen antes de que la universidad se cierre", afirmó.
También indicó que el cierre no se concretaría inmediatamente, sino la universidad podría seguir funcionando hasta por tres años más.
En cuanto a la Universidad Pedro de Valdivia –que también está siendo investigada por el ministerio–, señaló que "no hay todavía pruebas de que haya cometido una infracción a sus estatutos" y aclaró que " actualmente no tiene ninguna restricción" en su funcionamiento.