El diputado advierte que RN rechazará la propuesta de salario mínimo si el Gobierno no la aumenta.
Pablo Ovalle, El Mercurio.SANTIAGO.- El impacto que provocó en RN la derrota de Andrés Allamand en las elecciones primarias abrió un periodo de duros cuestionamientos al interior de la colectividad, que no ha dudado en apuntar sus dardos contra La Moneda por el rol que ésta jugó durante la intensa campaña que culminó con el estrecho triunfo de Pablo Longueira y la UDI.
Así lo manifestó textualmente su presidente, Carlos Larraín, quien desde hace largo tiempo viene denunciando un desequilibrio de fuerzas al interior del Ejecutivo y ha criticado el escaso trabajo de coordinación política que se realiza con los partidos de la Alianza, teoría que asumió con fuerza durante esta semana la bancada de diputados del partido, encabezada por Pedro Browne.
En entrevista con Emol, el parlamentario ratificó esa molestia, la cual quedó de manifiesto tras la decisión del grupo de no reunirse con el Presidente Sebastián Piñera en Cerro Castillo este lunes y la notificación de que rechazarán la propuesta de salario mínimo que ingresó el Ejecutivo esta semana al Congreso.
Al respecto, Browne reconoce que "la verdad es que habían ciertas incomodidades y llegó el minuto de hacer ver que la bancada de diputados no es simplemente un buzón para decir que sí a cada iniciativa del Gobierno. Por eso tomamos una actitud distinta con el salario mínimo, donde creemos que la cifra que el Gobierno propone no la consensuó con nadie".
Usted dice que hay incomodidades en la bancada respecto a la relación con el Gobierno, ¿qué otros problemas han tenido?
"Lo que ocurre es que la representación de RN en el Gobierno se ha ido mermado muchísimo, el único ministro que tenemos y que está trabajando en pos de generar esa comunicación es la ministra Cecilia Pérez. Entonces estamos un poco huérfanos y eso ha producido una distancia entre el gobierno y el partido, sentimiento que se ha ido reproduciendo de manera muy intensa".
En ese sentido, ¿hay una crítica a la labor que ha ejercido el ministro del Interior, Andrés Chadwick, en la coordinación política con los partidos de la Alianza?
"Lo que pasa es que la labor política del Gobierno se ha limitado a los comités de los días lunes y eso es una situación que hay que revertir. Nos quedan largos meses de Gobierno todavía y tenemos que salir muy bien parados, lo cual va a ayudar también a la candidatura presidencial en la medida en que trabajemos coordinados".
"Nosotros vemos una distancia absoluta, por lo menos en el caso de la bancada de diputados de RN. No hay relación permanente, no hay un actuar de los ministros en el Congreso, sino más bien a la distancia suponiendo nuestra buena voluntad de apoyar los proyectos y eso yo creo que es algo que hay que evidentemente mejorarlo".
¿Larraín le planteó esta molestia a Chadwick en la cita que tuvieron el jueves?
"Me imagino que sí, es un sentir que se ha ido acrecentando y yo creo que no es positivo que eso ocurra. Lo conversamos el día lunes en el comité político, la importancia de trabajar de manera coordinada y no puede ser más que sorprendente que al día siguiente ingresa un proyecto como el del salario mínimo sin haberlo conversado previamente con nadie".
En ese sentido, ¿la presión que colocarán con el tema del sueldo mínimo será una prueba de fuego para la relación con el Gobierno en los próximos meses?
"Hay que mostrarle al Gobierno que hay una bancada y un partido que tiene una voz importante en estos temas y que debe ser consultado para buscar un entendimiento más allá de lo técnico. Aquí no solamente valen las cifras técnicas, sino que vale la acción política, estamos en un año electoral y hay señales que tenemos que entregar que permitan que nuestras ideas tengan una validación positiva por parte de la gente".
Primarias: "Tenemos la convicción de que el Gobierno no fue ecuánime"
El presidente de su partido dijo que la alta presencia de miembros de la UDI en La Moneda jugó un factor importante en la campaña. ¿Coincide con ese análisis?
"Nosotros vemos que en el despliegue territorial no hubo un criterio realmente parejo porque hay un desbalance dentro del propio Gobierno. O sea, la cantidad de autoridades que se identifican con nuestro partido aliado es muchísimo mayor que los que se identifican con RN y eso evidentemente produce en un desequilibrio y cuando eso no se controla produce una situación que es incómoda y exacerba posiciones".
En ese sentido, ¿coincide con Carlos Larraín en que el Gobierno fue responsable en parte de la derrota de Andrés Allamand en las primarias?
"Siempre en las derrotas los primeros responsables somos nosotros mismos, pero evidentemente que hay situaciones externas que ayudan a que esos resultados puedan ocurrir y existe una cierta convicción dentro del partido de que La Moneda no fue del todo ecuánime que uno hubiese esperado frente a la primaria y el efecto del apoyo del Gobierno en definitiva se siente y es mucho mayor a lo que uno pudiera pensar".
¿Está superada la molestia en contra de Joaquín Lavín?
"La situación que manifestó la bancada respecto a la interlocución de Joaquín Lavín no pasa por la situación del día domingo, que fue muy puntual y pequeña. Lo que hemos planteado es que hay que buscar el mejor interlocutor y en ese escenario evidentemente Joaquín Lavín no es la persona más adecuada".
¿Por qué no es el más adecuado?
"Hay otras personas que podrían generar más confianza y hacer que el trabajo sea más fluido, producto de que hay una carga histórica de desencuentros y desavenencias y que cuando quedan cuatro meses para la elección es mejor tratar de dejarlas de lado y buscar una persona que permita que las comunicaciones y el trabajo fluya de la mejor manera".
¿Qué le parece la idea de integrar al comando de Longueira a la ministra Cecilia Pérez, que es la única figura de RN en el comité político del Gobierno?
"La verdad es que sería vestir un santo para desvestir a otro, porque quedaríamos ahí absolutamente huérfanos en el Gobierno y sin interlocución real entre el partido y La Moneda. Eso sería sumamente malo, por lo tanto aquí hay que buscar a otras personas y no mermar el trabajo del Gobierno”.