SANTIAGO.- El padre de los hermanos Francisca (16) y Sebastián Solís Silva (19), fallecidos en la tarde del sábado, luego que la avioneta Cessna en que volaban se precipitara en Colina, reveló este mediodía que fue él quien pidió al piloto que sacara a pasear a sus hijos.
"Aterrizó y yo le pedí por radio si podía sacar a mis hijos que tenían ganas de volar. Yo no lo hice porque tenía mi licencia de vuelo vencida y él amablemente accedió. Me dijo 'ya, les voy a sacar a dar una vuelta' y sucedió lo que sucedió", relató.
Visiblemente afectado José Solís, quien es piloto del Club Universitario de Aviación –al que pertenecía la nave siniestrada-, señaló que esa tarde el piloto fallecido, Juan Carlos Cornejo Andrade (53), había volado minutos antes con sus propios hijos y que al arribar accedió a su petición.
El acongojado padre añadió que al momento del accidente, él estaba en el club en una actividad por fiestas de fin de año, como es tradicional.
"Es algo realmente desastroso, a mí me tiene destrozado, a mi señora igual", expresó en las afueras del Servicio Médico Legal de Santiago.
José Solís descartó que el accidente se haya debido a un problema de mantención de la nave, porque tanto el club como la Dirección de General Aeronáutica Civil (DGAC) son instituciones muy exigentes tanto con el mantenimiento de las aeronaves como con la licencia de los pilotos.
Detalló que "el motor estaba nuevo, tenía 10 horas de uso. No quiero decir nada, ni adelantarme a los hechos. No me quiero imaginar nada de lo que pudo haber ocurrido".
Respecto al humo negro que se advirtió en un motor de las alas, sostuvo que él alcanzó a percibirlo y que de inmediato le avisó al piloto.
"No me alcanzó a contestar, pero yo creo que recibió la información, porque realizó un viraje inmediatamente para devolverse a la pista. El resto no lo sé. Es muy distinto ir al mando de la aeronave que tomar la decisión desde el suelo. Los inspectores de aeronáutica podrán decirlo cuando termine la investigación", indicó.
Los cuerpos de las cuatro víctimas fueron identificados por huellas dactilares, pero según se informó de todas formas se realizarán peritajes de ADN y dentales.
Las víctimas serán veladas desde esta tarde en el colegio Pedro de Valdivia de Peñalolén.