SANTIAGO.- Los altos niveles de radiación UV, que en estos días está experimentando la Región Metropolitana, han llevado a la Autoridad Sanitaria a reforzar la fiscalización de trabajadores expuestos directamente a la radiación UV.
Ante este escenario, el equipo de profesionales de la SEREMI de Salud de la Región Metropolitana, dirigidos por el doctor Carlos Aranda Puigpinos, fiscalizaron una obra en construcción, para constatar el apego a la normativa.
El riesgo de una exposición excesiva y/o acumulada a la radiación solar produce efectos dañinos a corto y largo plazo, principalmente en ojos y piel, este daño va desde quemaduras solares, queratitis, tumores malignos en la piel (cáncer) y cataratas a nivel ocular.
Por eso, se ha puesto énfasis, especialmente en esta época del año en aquellos trabajadores que realizan sus labores en espacios abiertos, bajo una radiación solar directa. Durante los primeros 10 días de noviembre de este año, los índices de radiación UV se han presentado en el rango de mayor riesgo; MUY ALTO.
La normativa vigente señala que el empleador debe proveer al trabajador de los elementos de protección necesarios contra la radiación UV (lentes, gorros y bloqueadores solares), según lo dispuesto en la "Ley de Ozono" (Ley N° 20.096) e implementar el programa de riesgos asociados a la exposición solar y las medidas de control adoptadas. Con el objeto que todos los trabajadores estén informados y hagan uso de los elementos de protección personal. También es responsabilidad del empleador publicar en un lugar visible los índices diarios de radiación UV.
El Seremi Aranda hizo un llamado a los empleadores y trabajadores, para que adopten las medidas preventivas contra la exposición solar: "Nuestra principal preocupación es protegerla salud de los obreros y el cumplimiento de esta normativa".
En el caso que un trabajador presente algún daño a la piel asociado a la exposición solar por motivos laborales, son los establecimientos de salud públicos y privados, los encargados de notificar a la Seremi de Salud sobre “quemaduras solares y detallar la superficie corporal afectada” del trabajador. A la fecha, la Región Metropolitana no presenta notificación de trabajadores con lesión o accidentes a la piel, ocasionados por radiación UV en el lugar de trabajo.
Una prolongada exposición solar puede provocar insolación, frente a un cuadro de este tipo las personas pueden presentar: mareos, dolor de cabeza, fiebre, visión borrosa, rubor en mejillas y frente, rostro muy rojo y caliente, náuseas, fatiga y aceleramiento del corazón. Por otro lado, la zona de piel expuesta sufre quemaduras, ampollas, erupciones y lesiones en la retina. También hay remedios que aumentan la sensibilidad de la piel cuando se expone al sol.
"Por ejemplo, los diuréticos, los antidiabéticos y algunos antibióticos derivados de la tetraciclina", señaló Aranda.