SANTIAGO.- Este martes, Manuel Cruzat Infante renunció a su derecho a guardar silencio y declaró ante la Fiscalía de Delitos de Alta Complejidad Oriente por presuntas operaciones tributarias irregulares que involucra a su holding con el Grupo Penta, controlado por Carlos Eugenio Lavín y Carlos Alberto Délano.
La diligencia se extendió por casi 4 horas y en ella participó todo el equipo de fiscales que trabaja en la causa -Carlos Gajardo, Pablo Norambuena y José Antonio Villalobos- además del abogado del empresario, Felipe Moraga, quien también asumió la defensa de Iván Rojas Bravo, ex ejecutivo del grupo Cruzat también investigado por el Ministerio Público.
Su declaración es parte de la ronda de nuevos interrogatorios luego de abrirse una nueva arista investigativa por contratos de "forward" o de futuro realizados para producir una pérdida o utilidad artificial con el fin de, entre otras cosas, pagar bonos a ejecutivos de Penta y que quedaron al descubierto en las afirmaciones del contador del grupo, Marcos Castro, y que luego fueron reafirmadas por Hugo Bravo.
Estas supuestas operaciones irregulares se habrían realizado entre el grupo Cruzat y Penta para contratos que simularían millonarias pérdidas en la empresa que controla Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín entre 2008 y 2012.