SANTIAGO.- Sebastián Piñera defendió este viernes los aportes económicos que hizo Inversiones Santa Cecilia -uno de los holdings de negocios del ex Presidente- a la fallida campaña presidencial de Evelyn Matthei, período durante el cual ejercía la Presidencia de la República y la sociedad estaba bajo la administración de un fideicomiso ciego.
Lo anterior, luego que "Ciper" revelara que el ex jefe de Estado entregó recursos a la ex senadora y a campañas políticas durante los años 2008, 2011, 2012 y 2013, por la vía legal de los aportes reservados canalizados por el Servicio Electoral (Servel).
Esto fue reafirmado por el ex gobernante, tras participar de un acto en La Moneda, en el que la Presidenta Michelle Bachelet recibió el informe con propuestas del Consejo Asesor Anticorrupción, creado luego que estallaran los casos judiciales que involucran a la clase política.
"Ese financiamiento es absoluta y totalmente legal. Igual como hay financiamiento público, tambien hay financiamiento privado que es legal, está dentro del marco de la ética y de la ley", dijo el ex jefe de Estado, que también utilizó a Bancard y Chilevisión como vías para financiar a candidatos municipales y parlamentarios.
"Las empresas en las que tengo participación han hecho aportes dentro del marco de la ley a distintas campañas y en distintas ocasiones y eso es perfectamente legítimo y legal, y además puedo decir que los candidatos son muy convincentes y exigente cuando necesitan financiar sus campañas", añadió Piñera.
Según el reportaje, las decisiones sobre financiamiento político no habrían sido tomadas por los administradores del fideicomiso ciego, sino por un comité ejecutivo formado por el abogado Fernando Barros, el empresario José Cox y el hijo del dueño, Sebastián Piñera Morel.
Ante la consulta de por qué los aportes reservados fueron realizados mientras estaba en La Moneda, recalcó que "a comienzos de 2009, un año antes de asumir la Presidencia, dejé total y absolutamente la gestión, administración y los directorios, y me desligué absolutamente de la marcha de las empresas, para asumir en plenitud la campaña presidencial y luego la Presidencia".
Por último, Piñera se declaró partidario de un financiamiento mixto de la política, ya que aseguró que "es peligroso que el 100% esté en manos del Estado, es decir, (debe ser) del sector público y privado, pero es evidente que ese financiamiento debe ser mucho más transparente, regulado y fiscalizado".