LA HAYA.- En completo silencio se retiraron las principales autoridades de Bolivia desde el edificio de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, tras la primera jornada de alegatos orales en el marco de la impugnación a la competencia de este tribunal interpuesta por Chile respecto a la demanda marítima en su contra presentada por el país vecino.
Quien sí habló fue el ex canciller y actual embajador en el Vaticano, Armando Loaiza, quien descartó que si la instancia internacional acepta los argumentos de su país se ponga en peligro a la región o amenace la paz.
"Ese argumento me parece excesivo, porque la amenaza a la paz es solamente cuando hay un ataque armado. El único acto de agresión es el ataque del ejército chileno a Bolivia en 1879", afirmó mientras salía desde la sede de la Corte Penal Internacional.
Loaiza agregó que los abogados que representan a Bolivia tienen una argumentación "consistente y sólida", asegurando que el tratado de 1904 "cambió la geopolítica del continente".
"Esto no es boxeo"
Sus dichos contrastan con lo expresado por el abogado español de la delegación boliviana, Antonio Remiro Brotons, quien llamó a las partes a tratarse con cortesía.
"Creo que siempre tenemos que manifestarnos en términos de respeto, de las buenas maneras y de la imagen de un país, y que obviamente sus voceros deben ser los primeros en serlo. Chile y Bolivia han sido exquisitos en el tratamiento de las cuestiones. Esto no es un combate de boxeo, es un litigio entre dos partes", enfatizó.
El profesional agregó que es de su preferencia el "hablar en los tribunales" y no en los pasillos para "evitar confusiones".
Además, Remiro Brotons calificó de "inteligente" la presentación de Chile y que cree que la situación limítrofe entre ambas naciones no está del todo zanjadas.