SANTIAGO.- Una reunión privada que sostuvieron altos ejecutivos de la empresa Celulosa Arauco-Constitución (Celco) con investigadores de la Universidad Austral de Chile (UACH), causó la indignación del movimiento ecologista Acción por los Cisnes, debido a que la entidad educacional está encargada de estudiar el origen de la contaminación en el santuario de la naturaleza "Carlos Anwandter".
A la cita, que se realizó el pasado jueves 24 de febrero, asistieron el jefe del equipo que indaga las causas del desastre ecológico, Eduardo Jaramillo, y el rector de la casa de estudios, Carlos Amtmann, quien negó haber recibido presiones de parte de la cuestionada empresa.
El académico señaló a radio Cooperativa que durante el encuentro no se abordó el tema del informe que preparan los científicos, sino que analizaron un eventual trabajo a futuro para la conservación del santuario.
Pese a ello, el abogado de Acción por los Cisnes, Vladimir Riesco, se mostró escéptico ante las verdaderas intenciones de la celulosa, que fue representada en la reunión por el presidente del directorio de Celco, Alberto Etchegaray, y el gerente general de la firma, Alejandro Pérez.