Como todo un militar fue despedido el joven soldado. |
LOS ÁNGELES.- En una sencilla ceremonia fúnebre que estuvo marcada por la impotencia y angustia, familiares y amigos de José Bustamante Ortiz despidieron los restos del que fue el primero de los conscriptos encontrado muerto en la denominada tragedia militar de Antuco.
En medio de una leve llovizna y bajo el himno marcial "He perdido un compañero", Bustamante recibió honores de miembros del Regimiento Chacabuco de la ciudad de Concepción, en una ceremonia en la que también estuvo presente el alcalde del municipio, Joel Rosales, y el gobernador de la provincia del Biobío, Esteban Krause.
El recluta formaba parte de un batallón de 485 soldados, la mayoría de 19 años, que regresaba de un ejercicio regular en la cordillera cuando fue sorprendido por una tormenta de nieve que le impidió llegar al Regimiento número 17 de la ciudad de Los Ángeles, situado a unos 100 kilómetros del lugar de la tragedia.
"No se cómo puedo estar parado aquí, junto al féretro de mi hijo. Sólo doy gracias porque ahora está junto a Dios", dijo el padre del conscripto Bustamante, mientras la madre del militar intentaba contener su rabia.
Durante el funeral incluso se vivieron algunos momentos de tensión cuando en el momento en que se le quiso hacer entrega de la bandera nacional, la madre del recluta bajó la cabeza en un claro gesto de rechazo.
Búsqueda contra el tiempo
Mientras tanto, efectivos del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea y Carabineros hacen sus mayores esfuerzos por encontrar a los 24 soldados que aún permanecen desaparecidos en los alrededores del Volcán Antuco y la Laguna del Laja.
Patrullas terrestres, maquinaria para la alta montaña, sistemas satelitales y helicópteros son utilizados en la búsqueda, la que se espera dé resultados positivos antes de que las condiciones climáticas empeoren.
"Es muy malo el pronóstico (...) es pésimo. Nos quedan 24 (desaparecidos) y si no los hallamos seguiremos las tareas de búsqueda. No vamos a descansar hasta que terminemos la tarea", afirmó hoy el comandante en jefe del Ejército, general Juan Emilio Cheyre.
Según informes meteorológicos, las condiciones climáticas en la zona cordillerana de Antuco empeorarían esta tarde, registrándose nevadas y vientos de hasta 70 kilómetros por hora que complicarían las labores de rescate y acrecentaría la angustia de los familiares que se agolpan en las afueras de la base militar de Los Ángeles.
Pese a estas adversidades, Cheyre aseguró que el operativo desplegado se mantendrá por tiempo indefinido.
"Estaremos con tropas permanentes hasta que desaparezca la nieve. Dios quiera que antes encontremos a todos", dijo la máxima autoridad castrense.