El Mercurio
Nora Helmer vive un matrimonio aparentemente feliz con Torvaldo (un abogado que está a punto de ocupar el puesto de director del Banco de Acciones) y sus tres hijos pequeños, pero guarda un secreto: alguna vez solicitó un préstamo para cubrir los gastos derivados de la enfermedad de su esposo, falsificando una firma, por lo cual está siendo extorsionada.
Sin embargo, la mujer guarda una esperanza: está segura de que, por amor, su esposo entenderá y asumirá toda la responsabilidad, si llega a saberse lo ocurrido. Pero no ocurre así, y el hombre reacciona ante su esposa con desprecio y enfado. Nora asume, entonces, que su matrimonio no era lo que pensaba y decide abandonar a su familia, ya que su única y más importante tarea es salir sola al mundo para "educarse a sí misma".
Con la dirección de Alfredo Castro, este nuevo montaje del Teatro Nacional rescata una obra escrita por el noruego Henrik Ibsen, estrenada por primera vez en 1879 y que, en palabras de Castro, se trata de "una obra es mucho más compleja que la tradicional anécdota de la liberación de una mujer educada para vivir con una venda en los ojos y servir de juguete, primero a su padre y luego a su marido.
Es un relato sobre el dinero, la clase media, la corrupción, las oportunidades, y los medios utilizados por esta clase social para sobrevivir a sí misma".