SANTIAGO.- Con un tono enérgico y que reflejó su molestia, la ministra de Educación, Yasna Provoste, lamentó la marginación "inexplicable" del llamado bloque social que integraba el Consejo Asesor Presidencial para la Educación y afirmó que el Gobierno no necesita de este tipo de presiones para llevar a cabo las reformas que requiere el sector.
"Este es un Gobierno que no necesita de presiones para dialogar en materia educativa. Este es un Gobierno que abre espacios para que exista el diálogo", afirmó.
La secretaria de Estado destacó el esfuerzo que han hecho todos los integrantes de la instancia creada por la Presidenta Michelle Bachelet para mejorar la calidad de la enseñanza.
"Quiero resaltar el esfuerzo que acá se ha hecho por personas tan diversas que han sido capaz de entender que la democracia se construye a partir de sentarse, de conversar, de convencer y no en imposición de las ideas", expresó.
Aunque al salir de la Estación Mapocho donde participó en el IX Congreso de Colegios Particulares, aseguró que no está molesta por la abrupta decisión que tomaron estudiantes y profesores, en varios pasajes de su discurso Provoste dejó entrever que no está dispuesta a tolerar que un sector imponga su voluntad.
"Claramente creemos que en este informe (del Consejo Asesor) ningún actor o sector, por importante que sea, puede imponer su punto de vista o esperar que el resultado de un trabajo colectivo refleje sólo la posición que le interesa, porque la democracia no se construye imponiendo los propios criterios", enfatizó.
En el encuentro, también participaron los presidentes de los partidos de la Alianza, Carlos Larraín (RN) y Hernán Larraín (UDI), el ex ministro de Educación y timonel del PPD, Sergio Bitar y la presidenta de la DC, Soledad Alvear.