En primer plano, el fiscal Carlos Hoffman
José AlvújarSANTIAGO.- Sin poder controlar las lágrimas, el fiscal Carlos Hoffman relató el momento en que la madre del niño secuestrado ayer, María Fernández, se reencontró con el menor que estuvo plagiado durante ocho horas por Isabel Bastías.
"La madre estaba destrozada, no podía hablar después de la entrega, al llegar al cuartel me tocó ver una madre que se cayó al suelo", señaló el fiscal visiblemente emocionado.
Luego de unos minutos y tras beber un poco de agua, Hoffman retomó la idea y señaló que su mayor emoción fue ver a la mujer y a los hermanos reencontrándose con el niño en dependencias del OS-9 de Carabineros.
A continuación el representante del Ministerio Público señaló que "ellos sabían todo de la familia (...) el secuestro es uno de los delitos más asquerosos que hay. Él nunca les hizo nada, pero tenían dinero, el padre es médico y la madre, administradora comercial, ¡gran negocio! pensó ella (Bastías) al igual que su cómplice que está prófuga con los cinco millones seiscientos mil pesos".
"Hace siete años me tocó algo parecido y revivir algo así es algo que no se lo doy a nadie", agregó el fiscal, justificando el momento en que se quebró.
El fiscal hacía referencia a un caso ocurrido en 2004 en Temuco, cuando el hijo de un conocido empresario de Victoria, Sergio Sigmund, fue secuestrado luego de recibir una llamada telefónica donde lo invitaban a un torneo de tenis.
El menor viajó hasta La Araucanía siendo plagiado en un terminal de buses por dos sujetos, y llevado hasta una zona rural, donde estuvo retenido por aproximadamente cinco horas.
El menor pudo escapar de sus captores, quienes habían pedido cinco millones de pesos por su rescate, llegando hasta el centro de la ciudad desde donde llamó a la policía.