TALCA.- Con ampliación de su detención por un plazo de tres días quedó Manuel Peña Landeros, de 53 años, imputado de haber matado a su hijo Andrés Peña Burgo, de 30 años, y luego haberlo enterrado en una parcela del sector rural de Cauquenes, sosteniendo haber actuado en defensa propia.
El autor de este crimen fue puesto a disposición de la justicia para efectuarle la audiencia de control de la detención, oportunidad en la que el fiscal a cargo de la investigación, Francisco Ávila, solicitó la ampliación del plazo de la detención para reunir mayores antecedentes que permitan formalizar cargos en contra de Manuel Peña.
Luego de la audiencia de control de detención, el imputado quedó recluido en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de esta ciudad.
Para sorpresa de los presentes, Peña se mostró tranquilo en todo el desarrollo de la breve audiencia y en la que se le acusó de haber dado muerte a su hijo de 30 años, según consignó diario El Centro.