VALPARAÍSO.- Durante cinco horas y media el ex ministro de Transportes, Sergio Espejo, enfrentó este martes a la comisión investigadora de la Cámara sobre el Transantiago, dejando en claro que el Gobierno tuvo a la mano la información antes de dar inicio al plan y que al interior del gabinete nadie se opuso a la puesta en marcha del 10 de febrero.
"Los antecedentes que yo he descrito y que llevaban a poner en marcha la fase tres el 10 de febrero, estaban en conocimiento de todo el Gobierno", aseguró el ex secretario de Estado.
"Aquí no existió un expediente A que dijera seguimos y un expediente B que dijera no seguimos. Creímos que las condiciones razonables estaban dadas, evidentemente eso no fue así", añadió.
Según enfatizó en reiteradas ocasiones, los antecedentes que disponían a esa fecha, siguiendo rigurosamente los informes de expertos, no hacían necesaria la postergación del inicio de Transantiago.
El abogado y militante democratacristiano aseguró que las decisiones tomadas en Transantiago cumplieron varios requisitos: seguir el análisis de los consultores expertos para determinar el número de buses; desarrollar un intenso trabajo con los municipios y los operadores de buses para definir las redes de recorridos; realizar un estricto monitoreo al sistema de pagos; y desarrollar un sistema de información que fuera útil para las personas.
Autocrítica y lealtad a la Presidenta
Además, en un claro gesto de lealtad a la Presidente Michelle Bachelet, Espejo afirmó que no acudió a la instancia fiscalizadora para defenderse "ni culpar a otros" y tajantemente asumió la responsabilidad política del inicio del sistema.
"Los ministros estamos para responder por las decisiones del Gobierno. Yo fui ministro de la Presidenta Bachelet con mucho orgullo, voy a respaldar cada día de su gobierno de aquí hasta el término de su mandato, y creo que he hecho lo que le corresponde a un ministro, asumir sus responsabilidades, yo no comento lo que hagan los demás", enfatizó.
A continuación, respondiéndole al diputado RN, Cristián Monckeberg, quien insistía en conocer la información con que contaba la Presidenta el 10 de febrero, sostuvo: "Por las decisiones de gobierno respondemos los ministros".
En su autocrítica, también manifestó que no ponderaron "adecuadamente los incumplimientos graves a los contratos que se firmaron de buena fe" y que no generaron "los instrumentos para intervenir en caso de incumplimiento".
"Es obvio que con la información que tenemos hoy día hay cuestiones que haríamos de manera distinta", reconoció.
No obstante, declaró que es indispensable identificar los errores y reconocerlos "como único camino para restituir y entregar a Santiago el transporte público que merece". "Yo estoy seguro que esta reforma va a ser finalmente exitosa", declaró.